Si
hay una expresión cultural con profundidad y visión de avanzada
en Estados Unidos, esa está en el cine independiente.
La selección de películas, actores y
directores para los premios Oscar de este año 2006, así lo
demuestra. Se trata de películas de presupuesto chico, pero con
temas potentes que reflejan las crisis y temores de la
superpotencia en lo interno y externo.
Marzo es el mes de los premios “Oscar”, de
ese juego de luces y visiones edulcoradas que, generalmente,
ocultan la realidad. Este marzo, un film nos mostrará la caza de
brujas, la persecución ideológica y el miedo que se proyecta
sobre la población por tener ideas distintas al poder político
de turno, también mostrará las peripecias de un inmigrante
ilegal, perseguido incluso después de muerto o que los cowboys,
ese icono del machismo de la conquista del “salvaje oeste”,
también pueden ser homosexuales.
“Good night, good luck”, dirigida por el
también actor y escritor George Clooney, refleja la persecución
política de comienzos de la guerra fría, la época del
macarthysmo, o la “caza de brujas”que se desato en Estados
Unidos por temor al comunismo. Clooney tomo para este relato la
acción del periodista radial Ed Murrow, que en su tiempo se
enfrento al senador Joe Mccarthy, lo expuso ante la opinión
pública y lo derroto en su prejuiciosa campaña de persecución
por ideas y formas de expresión filosófica. El argumento de
Mccarthy era aplicarle a todo lo que no le gustaba o no
entendía, el marbete de “comunista”, para así emprender su
persecución o censura. A eso se llamo “macarthysmo” y es sin
duda una etapa negra en la historia norteamericana del siglo
veinte con nítidos reflejos en nuestros tiempos.
“Brokeback Mountain” que ha generado una
cantidad de candidaturas, como mejor película o mejor dirección,
trata de la relación homosexual entre dos cowboys. Ha sido
dirigida por el exitoso cineasta chino Ang Lee, quien, luego de
una serie de rotundos éxitos en Hollywood, ahora radica en
Estados Unidos.
El máximo director de cine de estos tiempos,
Steven Spielberg, está presente con “Munich”, sobre el secuestro
de atletas israelíes por un comando palestino en las Olimpiadas
de 1972 en esa ciudad alemana, y trata sobre el dilema, también
muy actual, de la caza indiscriminada de terroristas. “Mi
película no exalta un ciclo de violencia”, se defendió Spielberg
para asegurar: “se trata de la condición humana”. Por razones
religiosas y culturales, Spielberg está muy ligado a la
comunidad judía y a Israel.
Muchas figuras que han pasado exitosamente
por Hollywood, son ahora protagonistas de esta poderosa
expresión de ideas de avanzada en un tiempo donde las
tradicionales libertades norteamericanas se sienten amenazadas
por mentalidades cerradas o decrepitas, como en el
“bandwagon”del actual gobierno republicano.
Estas reflexiones me saltan a propósito del
reciente éxito en el festival de Cannes de la película del actor
Tommy Lee Jones, “Las 3 muertes de Melquíades Estrada”, la
historia de un inmigrante ilegal que es asesinado por un policía
rural. La película sobre Jesucristo de Mel Gibson el 2005 ya
mostró claramente el poder que puede lograr el cine
independiente, libre de ataduras financieras y convencionalismos
del sector empresarial de Hollywood. En suma, libre de censura,
el cine independiente, que tuvo como reconocido gran iniciador
en John Cassavetes (‘El bebé de Rosemarie’), es una abierta
expresión de libertad en EE.UU. y varias películas citadas en
esta entrega de premios de la Academia reflejan tendencias
críticas o muy reveladoras.
Ya son varios los destacados actores de cine,
que han tomado ese camino independiente, que significa un
revolucionario acontecimiento en la industria del llamado
“séptimo arte”: Robert Redford y Clint Eastwood son dos ejemplos
destacables. También Woody Allen, quien acaba de lanzar su
última creación.
“Crash”, la película premiada este año,
describe el racismo y el abuso de la policía de Los Angeles,
situación que se repite en todas las grandes ciudades
norteamericanas. Hollywood era antes el gran escaparate de
ilusiones norteamericanas. Hoy es el espejo de una sociedad con
las alturas del poder corruptas y una violencia interna que es
el verdadero terrorismo que amenaza a los norteamericanos.