La
Revista “Nueva Sociedad” correspondiente a los meses
septiembre-octubre 2006, está dedicada al tema “América
Latina en tiempos de Chávez”.
Está demás señalar el interés que tiene el
tema para los venezolanos. En lo fundamental queda claro a
la luz de los más
Variados expositores que el autócrata nada
tiene que ver con una izquierda que esté en armonía con las
nuevas realidades de nuestro continente y del mundo La
economista chilena Marta Lagos, escribe:
“En América Latina, los líderes de izquierda
se han adueñado de las banderas de la democracia. Esto
ocurre en un momento en que la población demanda los
postulados de la vieja izquierda: igualdad ante la ley, más
empleo, menos pobreza, más acceso a las oportunidades y, por
supuesto, educación, salud y vivienda. Es una simbiosis
entre la demanda y la oferta democrática. Pero los
ciudadanos NO DEMANDAN MAS IZQUIERDA, sino mas democracia,
PLURALISMO, LIBERTAD DE EXPRESION Y DE MOVILIDAD SOCIAL. LA
IZQUIERDA SE HA VESTIDO DE DEMOCRACIA, PERO NO QUEDA CLARO
QUE LA DEMOCRACIA SE QUIERA VESTIR DE IZQUIERDA”. (Ob.
cit. p 99, may. mías)
Es certera la doctora Lagos. Si sometemos al
autócrata a estos parámetros, para decirlo en criollo, está
raspao!
Lamentablemente en nuestro país hay pocos
debates ideológicos. Por supuesto no me refiero a un
autócrata que se cree un sabio y dice unos disparates de
marca mayor en el terreno que escojamos: teórico, histórico,
económico, social, sino a tipos como Rangel que de marxismo
no sabe nada porque nunca lo ha estudiado, sino a esos
jóvenes que repiten dogmáticamente conceptos que han sido
refutados por la marcha de las sociedades y por tanto
abandonados por lo que toca a las fuerzas progresistas del
mundo.
Examínese la conducta de cualquiera de los
gobernantes que en Latinoamérica son considerados de
izquierda y ninguno habla de liquidar al capitalismo, como
ofrece el de “aquí”. Son comportamientos diferentes de
estadistas que piensan en sus pueblos y están a tono con el
progreso. El progreso de “aquí” cree que insultar a Busch es
la actitud más revolucionaria del mundo, y lo que hace es
caer en el ridículo. Además, estima que las fuerzas de
avanzada en el mundo son Irán, Siria, Corea del Norte,
Bielorrusia y Cuba, cuando éstas son fuerzas del atraso,
reaccionarias, a la luz de las exigencias del presente .El
marxismo estuvo 70 años en el poder, fue la doctrina
oficial, se derrumbó sin disparar un tiro. El estatismo, el
culto a la personalidad, el “monolitismo”, la “unanimidad”,
la colectivización forzosa en lugar de un hombre nuevo lo
que formó fue una casta burocrática-policial y condiciones
de vida de un atraso feroz en comparación con otras
sociedades.
Al referirse al papel contradictorio de
Chávez en la región, a los efectos de su “diplomacia
petrolera”, Andrés Serbin, conocido de los lectores
venezolanos, afirma:
“Olvidar que este papel (el de Chávez, nota
mía) está teñido de nuevos componentes autoritarios y
militaristas sería, sin embargo, extremadamente peligroso. Y
confiar, finalmente, en que estos cambios abran el espacio
para una verdadera participación ‘desde abajo’ de la
ciudadanía regional en impulsar el desarrollo, la equidad y
la integración (para no mencionar la paz), probablemente sea
ingenuo” (ob. Cit. p.91)