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No
solo la temporada comenzó mal para la escudería campeona del
mundo, sino que el lanzamiento adelantado de su nuevo bólido el
F2005, tuvo un efecto contrario al esperado. Las dudas se
instalan, las ambiciones para ésta temporada 2005 se revisan en
Maranello.
Tres grandes premios, tres victorias para
Renault. Algo hay que hacer y con urgencia, en ese sentido
Schumacher, Barrichello, Badoer y Marc Gene, al volante de los
nuevos Ferrari han rodado miles de kilómetros en ésta última
semana, tanto en ensayos privados en Italia, como en España a la
vista de sus contendores.
En el día de hoy en Imola, al finalizar los
ensayos libres Schumacher ante la prensa señalaba que los autos
progresaban, los conocemos mejor y podemos anticipar los
problemas; soy optimista, ganaremos algunas carreras éste año.
Sin embargo, Schumacher con esas declaraciones no hizo sino
inquietar aún mas a los fanáticos, ¿Schumi hablando de la
posibilidad de ganar “algunas” carreras?
Sin duda el discurso comienza a cambiar y
del mismo se desprende que Ferrari ya comenzó a devaluar – ante
la evidencia – sus propias aspiraciones para ésta temporada
2005.
No obstante, Imola podría dado el perfil de
la pista, ofrecerle un puesto en el podium al menos a uno de los
Ferrari. Un trazado de rectas cortas, chicanas estrechas,
violentos cambios de dirección y un pavimento poco abrasivo.
Pero los neumáticos Bridgestone siguen siendo un punto débil en
ésta temporada. Los ingenieros de la casa nipona deberán hacer
algo para salvar el honor.
En fin, las expectativas de Ferrari son
enormes para el GP de éste fin de semana del 24 de abril. Si
ninguno de los rojos sube al podium y si además Renault vuelve a
ganar, lo que queda de temporada se convertirá en pesadilla para
los campeones del mundo.
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