El
decreto del recién nombrado presidente Carmona, a
través del cual se disolvían los Poderes Públicos
produjo reacciones inmediatas de disidencia y
hasta retiro de algunas de las personas que un
principio apoyaban a Carmona.
Al mismo tiempo, al
mediodía del sábado 13 de abril comenzaron a
concentrarse manifestantes frente a Miraflores, lo
cual provocó que quedara suspendido el acto de
juramentación de ministros del gabinete de Pedro
Carmona Estanga.
En
los cuarteles no existía un apoyo unánime en
cuanto a las acciones tomadas por Vásquez Velazco,
dichas diferencias se multiplicaron luego de la
autocoronación de Pedro Carmona.
El
líder del descontento castrense es el Comandante
de la IV División Blindada del Ejército, General
de Brigada Raúl Isaías Baduel, quien anunció su
desconocimiento al nuevo gobierno de
Carmona. Enseguida se puso el General Baduel, al
frente de la organización y puesta en práctica de
la “Operación Restitución de la Dignidad Nacional”
la cual tenía por finalidad rescatar al presidente
Chávez.
Se producen los
primeros movimientos militares dentro del palacio.
Se habla de francotiradores. Los funcionarios
designados por Carmona que se quedaron rezagados
piden protección para salir. Un guardia le
responde a varios de ellos: 'Quítense las
chaquetas y las corbatas y salgan
tranquilamente...total, a ustedes nadie los conoce
todavía'.
Militares de la
Guardia de Honor arengan a los manifestantes y les
hacen ver que son leales a Chávez. La
concentración comienza a tomar cuerpo.
A las 3 de la
tarde, los ministros Aristóbulo Istúriz, María
Urbaneja, María Cristina Iglesias y Ana Elisa
Osorio, entran a pie al palacio. Entre 6:00 pm del
sábado y 3:30 am del domingo, la concentración es
multitudinaria y rodea el palacio entero. La
muchedumbre sólo quiere una cosa: ver a Chávez.
Finalmente a las
4 de la madrugada del domingo 14 de abril el
Presidente Chávez regresa a Palacio en
helicóptero.
|