|
|
El
oxímoron
por Alexis Márquez Rodríguez
miércoles,
19 octubre
2005
|
|
Entre las figuras retóricas
del tipo de las figuras de construcción también destaca
el oxímoron, menos frecuente en el habla común, pero
igualmente importante. A veces lo empleamos sin saberlo, como en
los demás casos, aunque es más elaborado, pero de todos modos
suele usarse de manera inconsciente. Consiste en una antítesis
en que se emplean dos palabras o frases de significados
opuestos, dando vida así a una nueva expresión, que de hecho
integra las otras dos, pero tiene un significado diferente. Como
cuando decimos, por ejemplo, agridulce, claroscuro, música
callada, soledad sonora, estruendoso silencio, difícil facilidad...
En el trasfondo de estas expresiones hay, sin duda, un valor
metafórico.
Son expresiones que se emplean en el lenguaje común, aunque
dentro de un contexto de cierto nivel culto; pero el oxímoron
se usa más frecuentemente en el lenguaje literario. La
ardiente paciencia es el título de una novela del chileno
Antonio Skármeta, en el que se contrapone la sensación de
ardor, a la idea sosegada de la paciencia. Don Pedro
Calderón de la Barca, uno de los más eminentes poetas y
dramaturgos españoles, de la época barroca, en su obra de teatro
más importante, La vida es sueño, emplea varias veces el
oxímoron. Por ejemplo, en el monólogo de Segismundo, al
comienzo de la obra, dice el prisionero: ³Inmóvil bulto soy
de fuego y hielo². Y también: ³Una prisión oscura / que es
de un vivo cadáver sepultura². En el primer ejemplo se
emplean los términos contrapuestos fuego y hielo,
y en el otro los vocablos vivo y cadáver. En ambos
casos la contraposición semántica da origen a una tercera idea,
muy bien definida: la imagen de un prisionero que se queja de su
desgracia, y que oscila entre la indignación (fuego) y la
frialdad de la impotencia (hielo), y siente que es un
cadáver, pero sigue vivo.
También Garcilaso de la Vega, en la Égloga Primera,
utiliza un oxímoron para describir el desdén de su amada,
doña Isabel de Freire, trasmutada en Galatea, a la cual se
queja el pastor Salicio: ³¡Oh más dura que mármol a mis quejas,
/ y al encendido fuego en que me quemo / más helada
que nieve, Galatea, / estoy muriendo y aun la
vida temo, / témola con razón, pues tú me dejas, / que no
hay sin ti el vivir para qué sea². Aquí se emplea dos veces el
oxímoron: al contraponer el ³encendido fuego² a la
frialdad de la nieve, y cuando se contraponen la vida
y la muerte.
Un venezolano que usó mucho el oxímoron, a veces
combinado con otras figuras retóricas, fue Alfredo Arvelo
Larriva, el mayor de nuestros poetas modernistas. Veamos una
muestra: ³Con el herido corazón vendado / por ti, me
desespero de esperanza². ³Y tras los lentes claros,
las pupilas oscurasв. ³¹¡Canta! Sobre la lira es
impotente / la injusticia brutal de la justicia².
³Noche de carnaval. Cuerda locura / se desbordaba en olas
de alegría². ³¡Oh ruso rudo y fuerte, suerte de anciana encina /
que aun reverdece bajo los copos del invierno². ³Y
bajé la calle por tornar a verlos, / y torné a subirla
por afán de ver².
También en la prosa literaria se usa el oxímoron. Alejo
Carpentier, en un pasaje de su novela El siglo de las Luces
dice: ³Šel adolescente miraba la ciudad, extrañamente parecida,
a esta hora de reverberaciones y sombras largas, a
un gigantesco lampadario barrocoв; aquí se contraponen
reverberaciones y sombras largas. También: ³Šun
crepúsculo que pronto incendiaría el cielo durante unos
minutos, antes de disolverse en una noche repentinaв,
donde contrastan la idea de incendiar el cielo y la
imagen de la noche repentina. Más adelante describe un
personaje agobiado por un ataque de asma, y dice que ³exhalaba
un silbido sordo², contraponiendo el sonido agudo
de un silbido a un sonido bajo. A renglón seguido
habla de sus ojos, ³ausentes a pesar de su fijeza²,
enlazando dos ideas igualmente contrapuestas: la ausencia
metafórica de los ojos y la fijeza de su mirada.
Como se ve, el oxímoron es una figura retórica de gran
fuerza expresiva.
Oiga
de lunes a viernes, a las 11,30 a.m., CON LA LENGUA EN ONDA,
por la emisora ONDA 107.9 FM, la superestación, en el
programa de Mari Montes.
|
|
|
|
|
|
© Copyright 2005 - WebArticulista.net -
Todos los Derechos Reservados. |
|
|
|
|
|
|