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Todo morirá en La Habana
por Alberto Franceschi  
vartes, 28 noviembre 2006

 

Llegó el momento de pensar que hacer con el chavismo después del 4 D. Una vez que logramos derrotarlos, Porque viene algo tan difícil como haber recuperado la mayoría nacional para la sindéresis de la convivencia democrática ¿Cómo lograr, luego de décadas de dislates, un país normal y estable para edificar confiablemente el futuro?

Ya va, amigo, podrá increparme alguien: primero contamos los votos y si en verdad nos imponemos, entonces vemos.

Y le respondería: Si contamos con Manuel Rosales conservando el liderazgo, con la seriedad y contundencia de la acción de la oposición, de estos últimos meses y aportando nosotros la presencia millonaria de multitudes en la calle, incluso perdiendo, ya entramos inexorablemente en la lucha por recuperar el país, de manos de esta casta de depredadores y lúmpenes, rojos rojitos, atrincherados en el poder ilegitimo. 

 Es un hecho que ya logramos, en el itinerario de la recuperación activa de la mayoría nacional, antes incluso de contar votos, el punto de inflexión desde donde es posible que le paremos el trote en seco, a quienes a palos nos metieron como chigüires en el pantano de la mentada quinta república, o nos trajeron arriados como ganado es estampida al borde del precipicio de la anarquía y la confrontación fraticida, o lo que es casi igual por que lo prefigura: al desmantelamiento por cuotas diarias de toda cohesión social y de la institucionalidad republicana. 

No nos enredemos, aunque lo más difícil que hay, sea pensar y actuar con cabeza fría en medio de un escenario enloquecido por la polarización extrema. 

El 3 D la tentación más común será la del arrebato o la capitulación. Recordemos de donde venimos... No haré ahora, ya lo prometí, el historial de nuestras tortas, provocadas por la mezcla más dañina que se conozca en política: lenguaje de ultimátum con cobardía paralizante en la acción, o por decir lo menos, inhibición timorata para arrancar la iniciativa al contrario.

Porque fue así que la derrota siempre estuvo garantizada, sobre todo teniendo frente a nosotros a un desalmado experto, que resumió en su cabeza la picardía política de cinco siglos ya probada con su permanencia en el poder por 47 años, sin olvidar los 6 más que había acumulado como de líder, desde su asalto al Cuartel Moncada el 26 de Julio de 1953, cuando “la historia lo absolvió” por la estupidez política de la clase política norteamericana y su lacayo, el dictador Fulgencio Batista. 

¿Saben la primera ventaja que tenemos ahora, antes incluso de contar los votos? Pues que el loquito quedó por su cuenta, porque el cerebro de nuestros males agoniza irremediablemente, desde que le quitaron las tripas al cuerpo que lo mantenía vivaz. El chavismo astuto, estratega de grandes maniobras de ajedrecista campeón en la geopolítica mundial, está muriendo irremediablemente en la Habana…y para bien o para mal, ya empezamos a tropezar con la ordenanza, el propio gallineitor. ¿Acaso no se nota? Yo creo sin embargo que el aprendiz no dará la talla. Apenas es consciente de la enrredina en que lo metió quien no podrá ya aconsejarlo, ni salvarlo de sus dislates. ¿Dictadura de origen en sufragio universal trampeado? Yo te aviso chirulí.

¿Arrancarle a un país de sociedad democrática sus libertades y su destino a punta de interminable cháchara y amenazas? Que va misufú, te pelaste otra vez.

 ¿Comprando y humillando a millones con dádivas, al tiempo que arrumas a tu alrededor una casta de malandros hechos magnates? Allí si la pegaste, si puede llamarse acertar a retener por la barriga y la codicia, a la minoría del país dispuesta a vender su alma disfrazados de rojo. 

He pensado y he escrito varias veces, que casi prefería que Castro estuviera vivo en los días de nuestras definiciones futuras. Pero después de nuestras avalanchas y sintiendo de cerca algunos reproches de cubanos que dicen ¿no te basta con lo que ya aguantamos a ese tirano, para que le desees un mes mas de vida?

 He de justificarme diciéndoles que de las paradojas de la historia, la mas redituable para ellos, es que la lenta agonía del gran bicho, permitirá una transición mas calculada, sobre todo porque tendrá, desde el 4 de diciembre, el añadido que se acaba la manguangua del subsidio chavista, a los mostrencos militares cubanos en el poder. 

 Es decir vuelven de carajazo a sus incertidumbres, con la remesa bolivariana de diciembre, pero sin que puedan contar con la de enero.

 ¿No les sorprendió  la inoportuna exigencia cubana, en medio de la recta final electoral, del pago de 2.200 millones de dólares, que debemos volvérselos a pagar de inmediato como presagio de un final próximo, y esto después que creíamos que  los médicos mas caros de mundo ya estaban pagados con petróleo?.

Definitivamente el mar de la felicidad parece encresparse a medida que se acerca el fin del mecenas, tan próximo como el 3 D, que para capricho de la historia se hace simultaneo al solícito abrazo del más allá, armado de su guadaña, exquisitamente presentada al ideólogo con anticipación, lo que significa, a fecha cierta, que se aligera todo el proceso de obligada apertura, o fin del régimen por lo que tanto se ha trabajado. 

Gracias por leérmelo elegante, ahora va directo: raspado Fidel se desencadena todo, más aun porque coincide con la caída del locario nuestro. 

Permítaseme reiterar o resumir una tesis. Al gobierno castrista siempre le convino la permanencia de Chávez en el poder, pero bajo ningún concepto quisieron envolverse en un plan belicista locoide de este aventurero nuestro, en el escenario regional.  

El acuerdo entonces entre Castro y el Sabaneitor  fue: “grita y patalea contra Bush, todo lo que quieras, eso te da réditos y te compra tiempo con cero costos, mientras les mandes tu petróleo, que nos conviene a ambos, para seguir financiando holgadamente la revolución latinoamericana, empezando por nuestra bloqueada Cuba, pero jamás des un paso que implique riesgos bélicos para los que no puedes contar con el sufrido pueblo cubano que ya dio sus cuotas de sangre, contra el imperialismo, en las guerras africanas.” Que por cierto 20 años mas tarde solo pueden verse como recursos cínicamente útiles, para mantener de forma macabra en tensión la “fibra patriótica, e internacionalista cubana” es decir la ocupación de un ejército en aventuras militares totalmente pagadas por la Unión Soviética, que cobraba en sangre cubana, sus subsidios de 30 años a la Isla de sus trueques, con los equilibrios de terror nuclear con USA, en la llamada Guerra Fría. 

El relevo de Fidel que se supone asumiría Chávez con nuestro debido entusiasmo, era para convertirlo, sobre todo en provecho de Cuba como el factor de estorbo regional de la geopolítica de USA. Recordemos que el negocio de Castro siempre fue vivir de la confrontación y de negociar apaciguamientos de conflictos que inicialmente había atizado. En lo estrictamente personal esto se aliñaba con denuncias de supuestos atentados: 643 hasta el 2004, según lo escrito por los servicios de seguridad castristas. 

En la entrega de la posta de Fidel a Chávez es que se encuentra el sentido a la manía de Chávez por ofrecer nuestra sangre venezolana, para cuanto escenario de conflicto real o imaginario, se le ocurra. Ya Castro le hizo saber que Cuba no estaba en condiciones de aguantar un cimbronazo militar con su economia exangüe, menos aun cuando por fin gracias a nuestros mil millonarios petrodólares, el pueblo cubano empieza a mejorar algo su nivel de vida. Y según este par de cipotes ahora nos toca a nosotros pagar su enceguecida pasión por el poder con decenas de miles de muertos en no se cual mierda de guerra. 

Pero mientras llegan esos tenebrosos conflictos y gracias a Chávez y a la paciencia infinita de los venezolanos, a quienes poco les duele esa riqueza fácil que sale de su subsuelo, y que ahora se regala en rebatiña, se cumplió el sueño de Fidel de ver los dólares yanquis chorrear como maná y a borbotones sobre su isla hambreada. 

No importa que fuesen chuleados, él se despide con el consuelo de tísico que esas erogaciones de máxima pillería roja, están por llegar a su final abrupto, cuando él mismo ya siente en su nuca el soplo de la eternidad que lo alcanza. Las culpas de lo que viene, cavila en su agonía, se las echaran a otro, él ya tiene su puesto en la historia, aunque solo sea recordado como Stalin y Mao, con las maldiciones de la mayoría de quienes les hizo un ocho la vida, por no hablar de quienes sufrieron exterminios, deportaciones y exilios masivos, torturas y mazmorras por décadas, o la mas común de las opresiones: la esclavitud del silencio de las colas eternas para alcanzar medio comer en la indignidad. 

En medio de la jornada electoral del 3 D. si bien se juegan demasiadas cosas sobre el destino de la casta AUDI gobernante, lo central, lo oculto pero omnipresente, con una fuerza endemoniada, es el factor cubano gravitando como los zopilotes sobre nuestro despojos de republica, convertida en satrapía política de los chulos de esa burocracia cubana.

Y para los que creen que todo se decide en la noche del 3 de diciembre, les tengo la mala noticia que ese día apenas empieza, la otra etapa de las maldades en las que nos metió la historia en aquel fatídico día, en que se les ocurrió elegir la plasta roja. 

Pero que nadie se equivoque, y es por ello mi indignación no con los abstencionistas sino con sus pretendidos teóricos y propagandistas. De la victoria del 3 de diciembre dependen demasiadas vidas, porque si la caída del bicharraco no empieza ese día, cada uno adicional que pasemos con él, al frente del poder y sin los frenos de Castro, pueden llevarnos a una verdadera tragedia de la que aun no hemos visto sino el abrebocas. 

Ruego me disculpen quienes tienen solo costumbre de leer en la uní-dimensionalidad de las buenas noticias o de los análisis que siempre cuadran sin ninguna variable molesta. 

Chávez llegó hasta aquí, por la sabia y erudita maldad política de Castro, eso significa que agradecemos al gran chulo del Caribe nuestra amargura de haber soportado al pupilo aventajado en las artes de diseño de dictadura.

 Pero nunca olvidemos que para Castro solo importaba de una manera que nadie como él pudo alcanzar a imaginar, los intereses de su excrescencia social burocrática cubana gobernante. Todo, absolutamente TODO, se subordina a su interés nacional y su prioridad estaba mantener la paz en el Caribe.

Nunca olvidemos que eso fue pactado en secreto desde la guerra fría y de ello ha vivido Castro, su estirpe, y su macabra obra maestra, el comunismo cubano aceptado con paz de sepulcros.

De esa paz venimos, en esa paz estamos y para suerte nuestra, los vientos que soplan, a la muerte del tirano, no son solo los fúnebres y gélidos que anuncia o deja la pelona  a su paso, que por fin lo arrebata, sino la brisa cálida desde La Florida, donde un millón de cubanos muy prósperos en su mayoría, aspiran el reencuentro, coincidiendo con sectores muy importantes de la dirección cubana, que preferirán entenderse con USA, para la restauración capitalista, que les convierte en Nobregas y Aristóbulos prósperos, a seguir solo chuleando de Chávez, el hombre del incendio, del que ya no quieren oír hablar mas. Por cierto, sigue confirmándose la salida masiva de médicos cubanos. Algo grave fue decidido con la “solidaridad” de los cubanos de Raúl con Chávez y no está claro. Una de dos: o se van para no ser chispeados por la bancarrota y suerte maleva del locario, o este les pidió que vayan a disfrutar en pascuas lo que compraron aquí, para que se vengan en Enero cuando ya él tenga el coroto recapturado por cualquier medio, dispuesto para una escalada aun mayor del chuleo.   

Pero nuestro foco de interés  debe dar respuesta a nuestras propias incertidumbres luego del 3 D. Abusando de  reiteraciones que irrespetan vuestra perspicacia, déjenme repetirme, en aras de la coherencia de este escrito, que los procesos después del 3 D, dependen de cómo queden los números, si perdemos, si ganamos, si es por paliza, si hay fraude, si en verdad habría una  sublevación general ante un dislate mayor chavista, queriendo imponerse a cuenta de nuestra mansedumbre, ya rayana en el suicidio como nación, etc. 

Es tal la maraña de siniestros lazos de subordinación chavista al aparato cubano, que sobre no pocas cosas hay que tener una agenda y estar preparados para debatirlos con ellos, por aquello del dueño del circo. Hasta este punto llegamos para imaginarnos una transición sin traumas mayores, desmantelando el régimen chavista, del que no puede quedar sino el amargo recuerdo. 

 “Paris bien vale una misa”, y para erradicar este quiste maligno adherido a nuestro Estado, si bien requiere de cirugía sin discusión, habrá que preguntarle a Raúl que si la quiere con o sin anestesia, coincidiendo quizá con el amo transitorio de Cuba, que a ambos nos convienen una salida sin grandes traumas. 

Pero quedan muchos otros problemas importantes. Si sabemos, por ejemplo, que en Venezuela se ha cometido el más grave de los latrocinios de la historia mundial y que el usurpador del poder tiene fuera del pais, no sabemos cuantos miles de millones de dólares, debemos también tener un plan para anular o mitigar los efectos demoledores de una oposición de magnates de la subversión.  

Yo creía hasta hace poco que cuando un hijo de Hussein mandó a raspar lo que había en las bóvedas del Banco Central Iraki, poco antes de la llegada de los yanquis a Bagdad y saqueó dos mil millones de dólares, era una de las hazañas de pillos digna de la épica delincuencial universal, pero hasta donde me da la implacable lógica, de lo que hemos presenciado con las finanzas públicas bajo el chavismo, aquí estamos ante malversaciones con ocultamiento de botín por cinco,10 ó 20 veces esa cantidad, lo cual es inédito, desde que los piratas ingleses robaban en el caribe occidental a la flota española cargada con toneladas de oro y plata. 

 Que Monagas, ni Guzman Blanco, ni que J.V. Gómez; el propio Pérez Jiménez en un ladrón de gallinas, comparado con lo que ha salido a nombre de Chávez y testaferros a depositarse, fuera del país, para financiar la revolución chavista continental. Ojalá no nos pase como con el oro de la pobre República Española, que por no poderlos recuperar, se lo afanaron los rusos dando explicaciones baladíes, sobre deudas de los rojos, atención a refugiados etc.

Nos conviene de inmediato reconstruir nuestra gran amistad con los USA ya no solo por todas las razones consabidas, sino por esta adicional, la de que nos ayuden a rastrear nuestros reales así los tengan en las cuevas de Osama Bin Ladeen. 

 Aunque pareciera complejo y ahorrando muchas razones, seguramente por uno o dos años será Cuba el gran centro de operaciones del chavismo sin poder, pero demasiado rico para no comprarnos problemas. Y curiosamente vuelve a ser Cuba la estación de paso clave, para nuestra paz negociada, sino queremos ir a fondo a la cirugía que nos metería en una tormenta que ganaríamos pero con costos indeseables para demócratas y humanistas.  

No es que la cirugía la  rechace a priori, porque quizás sea inevitable, Solo la anoto a beneficio de inventario, en esta hora en que  hay que empezar a ver de frente los nubarrones, luego de la victoria de Rosales y aunque les parezca casi escandaloso solo pensarlo, incluso si se perdiera.

 Porque, para decirlo con el momento de mayor obviedad de este artículo, Chávez de ganar, no podrá seguir gobernando como hasta ahora y Rosales si perdiera no podría liderar una oposición, grandiosa y multitudinariamente movilizada, con los cánones del quietismo, negocio o cobardía o que se yo como puedan juzgarse los ocho años anteriores de nuestras desventuras.

Porque el problema del poder seguirá planteado hasta no salir de la pesadilla chavista y si eso no termina el 3 D, pues seguirá hasta el 3 Z, pero la lucha no se detendrá. 

Lo inverso, el desalojo del orate, que para mi es lo mas probable y por lo que hemos luchado, también obliga a ir pensando en que la oposición chavista, si es que Chávez entregara, aunque sea a los trancazos, será un conglomerado político felizmente enrostrándose facturas y entredevorándose, por las responsabilidades de la derrota,  pero con un poder financiero tal de sus líderes, que nos resulta incuantificable y de capacidad inédita e inimaginable para comprar obstáculos y tratar de sabotear al nuevo gobierno. 

 Nada más fácil que presagiar tiempos de tormenta mientras el chavismo tenga el espinazo erguido, aunque sea a punta de billetes rapiñados de la gigantesca estafa, que habría de multiplicarse desde el Lunes 4 D al perder ellos el poder.

Ya hay que ir pensando en una dura declaración que proclame taxativamente a lo que se expone todo cuentadante del gobierno saliente, por disponer de bienes de la Republica en medio de la estampida.

Habría que comenzar con los juicios a estos desfalcadores de última hora. Y si este es un simple detalle, imagínense lo que significa volver a poner orden en este tremadal que nos dejaran los malandros de la quinta y ello con dos escenarios alternativos entregando las cuentas en orden o arrancándoselas ya en fuga.

Ya se que la impunidad es la tradición, hasta Chávez la empleó para, no juzgando nada efectivo del pasado, aspirar de su sucesor otro borrón y cuenta nueva.

Se también que eso corresponde a “decisiones de alta política”. Yo no se que pensará Rosales, pero mientras dure esa tradición este país no tiene destino…por mas que deliremos de entusiasmo y optimismo por salir de las garras del castrismo y de la casta AUDI y sus tropelías, en esta “quinta república” del bochinche y el abuso, con su líder que quiso hacernos el trueque de cambiar nuestro siglo XXI por un regreso a la barbarie. Pero…Todo Morirá En La Habana, faltan solo días para la agonía. La paz esté con nosotros.

franceschi1947@gmail.com

 
 
 
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