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La Carcajada China a Chávez
por Alberto Franceschi  
martes, 14 noviembre 2006

 

No hay nada oculto entre cielo y tierra. Todo se sabe o se comprende, aunque sea muy tarde. Siempre todo termina sabiéndose o explicándose.

En las milenarias costumbres chinas, nacidas de una cultura que es quizá la menos contaminada, hasta el siglo XX,  a no ser por orientales muy cercanos como los mongoles, quedó el hábito muy antiguo, de siglos, de lanzar una carcajada muy sonora en dirección al que habla, o del que se oyó algo extravagante que sencillamente no tiene como respuesta sino la enorme sorpresa recibida por el despropósito enunciado.

 

Esa carcajada es signo que lo dicho se recibe con gran humor o cinismo, por que esta, al propio tiempo, significa un rechazo educado al disparate oído, o a la incongruencia o absurdo de lo dicho, por ese disertante o interlocutor.

 

Mi amigo Moisés Moleiro gustaba contar una anécdota de lo más simpática a la que el le agregaba su teatralidad de narrador brillante. Cuando le tocó asistir a la Conferencia Tricontinental de La Habana el año 1966, donde concurrieron delegados de los partidos comunistas y de extrema izquierda del mundo entero, fue inevitable que el evento se contaminara con la diatriba infernal entre los comunistas chinos y soviéticos que se decían literalmente de todo.

 

Los chinos en particular, eran los más intemperantes. Sin embargo el oro de Moscú y su línea más conservadora, partidaria de evitar confrontaciones armadas, arrastraba a la inmensa mayoría de los delegados de los países, hacia su línea calificada acremente por los chinos como "revisionista y contrarrevolucionaria" del "social imperialismo soviético". Los chinos tenían por manía en esos años, expresarse de los soviéticos de la misma forma que Chávez lo hace ahora contra USA.

 

En la Conferencia uno de los delegados más belicoso y crudo contra los chinos y en defensa de la agredida URSS,  fue el delegado del Partido Comunista de Costa Rica.

 

Cuando este centroamericano terminó su diatriba pro soviética y anti china, se observó al delegado principal chino abandonar su puesto y dirigirse sigiloso para llegarle por detrás   a la curul del delegado tico. Ya ante él,   preguntó el chino de pié,  en perfecto  español: "Camarada…¿ me puede decir cuantos habitantes tiene Costa Rica?  El Tico  con solemnidad le respondió de inmediato:
!!  DOS MILLONES CAMARADA ¡¡

 

Fue entonces cuando el chino casi dándole la espalda y al mismo tiempo que le señalaba con su brazo totalmente extendido y   apuntando con su índice, muy despectivamente al tico sentado, le lanzó una sonora carcajada, casi monosilabita,  que toda la gran sala escuchó. El tico quedó de una pieza, con los ojos desorbitados por la sorpresa mientras observaba que el chino se alejaba con rapidez.

 

China tenía para ese entonces entre 900 y 1000 millones de habitantes. El pobre delegado Tico desconcertado, tuvo que comprender simultáneamente el tamaño de la influencia de su país y  su partido liliputiense, al lado del PCCH con 100 millones de miembros y el significado de la carcajada china que funcionó para que entendiera sus despropósitos.

 

Don Guillermo Morón, nuestro gran historiador,  que conoce mucho de China me contó hace pocos días de está vieja costumbre China y que yo pude de inmediato anudarla con los que muchas veces le oí contar a Moisés sobre esa Reunión de La Habana y la carcajada china. Me cuenta Don Guillermo Morón que conoció de primera mano la historia de cuando Chávez fue la primera vez a China, y esto se ha repetido en dos o tres ocasiones mas, que cuando Chávez menciona, cita, o   quiere lucirse con una reflexión nombrando pomposamente a Mao, el auditorio gubernamental chino suelta al unísono una sonora carcajada. Pasan los años y Chávez todavía vuelve a nombrarles MAO a los grandes burócratas chinos, que  es como mentarles la madre o someterles a la urgente necesidad de una GRAN CARCAJADA.

 

Sería muy simpático si pudiéramos tener en nuestra cultura criolla esa costumbre de la carcajada china. Además sería tan, pero tan útil, en los debates cuando los chavistas osan afirmar que el país esta feliz con ellos, pero sobre todo cuando afirman sin desparpajo   que van a durar hasta el 2021 ó 2031. Podíamos tener excelentes ocasiones para empezara a practicar la carcajada china contra los chavistas que juran que ganarán el 3 D.

 

Lo único malo es que por brutos lo mas seguro es que sigan sin darse cuenta…como Chávez cuando celebra a MAO ante sus víctimas.

franceschi1947@gmail.com

 
 
 
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