Todavía son muchas
las voces que se expresan a favor del ‘descubrimiento de
América’. En este registro se cuenta incluso gente del oficio
historiográfico anclados en el pasado y el atraso. Para el
festejo de los 500 años del primer gran holocausto de la
humanidad, la propia intelectualidad española se quiso apartar
del viejo concepto y propuso el de ‘Encuentro entre dos Mundos’,
con el cual se pretendía corregir un ‘error histórico’ pero se
mantenía la relación de superioridad impuesta por el invasor:
quien encuentra y quien es encontrado.
Los viajes de
exploración y conquista de nuevos territorios sólo podían ser
emprendidos por países con recursos. La finalidad era muy clara:
la expansión, dado que las tierras halladas y pobladas serían
propiedad de quien las ocupara o del propio Estado que
organizaba y financiaba las respectivas expediciones.
DESPOBLAR PARA
REPOBLAR
Pero en el caso de
la empresa colombina no se dan esas condiciones. Aquí no se
llega a tierras despobladas. Y no sólo hay poblamiento sino la
huella de un hacer, una obra y una producción que alcanza lo
económico, arquitectónico, social y religioso. Los exploradores
o navegantes se encuentran con tierras cuyos habitantes están
dispuestos a defender sus posesiones y sus frutos. Y el esquema
de llegar, tomar las tierras y poblar no procede. De allí que en
este caso el tal llamado ‘descubrimiento’ se convierte en un
acto invasor que para alcanzar su cometido debe ‘despoblar’,
exterminar o someter la población existente y borrar sus
huellas, para luego ‘repoblar’. Por ello desde que el
‘civilizado y culto’ hace acto de presencia se pone a andar la
maquinaria del vejamen y la muerte.
LA BENDICION
DEL EXTERMINIO
Y esa labor de
posesión armada, fue acompañada por la evangelizadora que trae
la fe y la religión del Dios Único a quienes eran politeístas y
que andaban con el Diablo metido en su cuerpo. Para sacarlo,
afirma un conocido cronista, era necesario abrirle las entrañas
a estos ‘indios’ a punta de cuchilladas. Para justificar la
acción de exterminio había que afirmar que aquellos seres no
alcanzaban la categoría de gente, por su condición de salvajes,
sin alma y que se ‘comían los unos a los otros’. La crueldad
desde entonces adquirió niveles incomparables. Y se contaron por
millones los sacrificados en nombre de la
civilización-cultura-religión.
INVENTAR PARA
DOMINAR
La idea era clara:
negar la existencia de una sociedad con un registro vital
milenario, para de ese modo hacer buena la tesis de que estas
tierras no estaban pobladas y que cuanto aquí surge es producto
de la civilización y el descubrimiento. Por ello mantiene O’
Gorman que ‘América es una invención de Europa’. Para él este
continente le debe su vida y existencia a España, Inglaterra y
Portugal. Y por ello ‘América es una continuación de Europa’.
Este es el
mensaje-interpretación de nuestra historia que ha regido por 513
años. Una vez obligados, por Bula Papal, a otorgarle condición
de gente a quienes ya habían sido exterminados en su mayoría, la
‘categoría’ descubridor-descubierto mantenía vigente la relación
de superioridad-inferioridad, incluso para los nuevos pobladores
que habrían de hacer vida y existencia en estas tierras. Esta es
una condición que en el día de hoy no se ha superado y que tiene
su aval en una concepción de la historia que se rige por la
visión del invasor de ayer y el de hoy.
SIGUE VIGENTE
LA VIEJA HISTORIA
Desde hace
más de treinta años venimos trabajando en la conformación de una
nueva concepción histórica que replantee el proceso vivido por
este continente a partir de la visión del colectivo que ha sido
objeto de la acción invasora y exterminio, que se mantiene hasta
el día de hoy. En las aulas de la Escuela de Historia, en la
década de los sesenta, de donde somos egresados, comenzamos a no
admitir el mote de descubiertos y a replantear los términos de
precolombino. La respuesta fue una defensa cerrada de la
historia tradicional que seguía año tras año repitiendo el mismo
cuento de la Nina, la Pinta y la Santa María.
LOS NO
DESCUBIERTOS
CONCIENCIA Y
CONDICION DISTINTA
Posteriormente, en
dos obras dejamos asentada esta nueva perspectiva: Modelos
de violencia en Venezuela y Clases sociales y
violencia en Venezuela, ambos de la década de los
setenta. Para la década de los ochenta fue tomando cuerpo lo que
denominamos el Movimiento de los No Descubiertos,
concebido como una conciencia y condición distinta, que realiza
su Primera Reunión formal en Mérida en 1986. Desde entonces
hemos producido una amplia bibliografía sobre el tema y hemos
insistido en un debate que rebasa la revisión del pasado para
tocar la historia de hoy y la vigencia y permanencia de un
pensamiento invasor que no logra superar los viejos esquemas de
dominación.
LA MISMA
DESIGUALDAD
Un régimen
descubierto que no se ha agotado en 513 años sino que toma aire
y se renueva para ejercer una misma acción. Hoy seguimos siendo
y actuando como descubiertos, inferiores o sometidos. Sigue
presente la legión de los amos-señores y de los
pobres-desheredados. Las dos dimensiones que nacen en 1492
siguen con vida, aunque cambió la forma y la propia voz de
mando. La independencia, ‘las oligarquías’ dictaduras,
democracias y revoluciones mantienen con vida las separaciones y
oposiciones. Es la misma sociedad de propietarios con nuevos
instrumentos de domesticación y sometimiento.
PLEITO ENTRE
INVASORES
Este es el
caso de la expulsión de las Nuevas Tribus. Después de casi medio
siglo se decide expulsarlos por su acción invasora y de
domesticación.¿Pero quiénes adelantan este operativo? Esto es
obra de los invasores gubernamentales, los mismos que depredaron
buena parte de la Gran Sabana, pulmón vegetal del mundo, para
construir un Tendido Eléctrico que Brasil no había podido
adelantar por las protestas al daño ecológico que habría de
producir en su parte de bosques. Este expaís, en cambio, estuvo
sí dispuesto a hacerlo y servir electricidad y ahora gas por el
mismo conducto de la depredación y el exterminio. Es la misma
genuflexión ante los poderosos cualquiera sea su signo.
¡QUIÉN ES EL
DEPREDADOR?
Pero el discurso
está llamado a ocultar las reales intenciones. Se expulsa a las
Nuevas Tribus en el mismo momento en el cual se entrega la
minería de oro del sur y el carbón del occidente a las
compañías llamadas a completar la obra de exterminio de las
etnias iniciada en 1492. Un depredador es reemplazado por otro,
con mucho mayor fuerza y capital y posibilidades de destrucción.
¿CUÁL
RESISTENCIA?
¿Cómo es que
entonces se adelanta la celebración de una tal Resistencia
indígena? Aquí la única resistencia ha estado desde hace 513
años en quienes siguen padeciendo sus carencias y miserias. Han
resistido a la propia condena a que fueron sometidos. Y han
resistido incluso a todos los que los han utilizado para todo
menos para devolverles la condición de gente que les fue negada
desde 1492.
La “revolución”
expulsa las Nuevas Tribus por invasoras e imperialistas, pero no
expulsa el sometimiento, la humillación, el vejamen-masacre que
recae sobre esta gente a la cual se sigue considerando
inferior. Se expulsa a las Nuevas Tribus. ¿Y a dónde se enviará
la gente bajo su acción? Se les lanzará a otro tipo de abandono
o se comprará su hambre para convertirlos en extractores de
minerales para otros propietarios.
En general, el
tenido como ‘indio’, sigue siendo para los invasores de hoy una
especie de cosa muy distante del señor, blanco y amo. Y lo que
es peor: la población en este ex-país sigue dividida entre
civilizados-criollos e incultos pobres entre los cuales está la
‘indianidad’. Dos extremos con un centro en el cual se registra
una creciente clase media que se ve arrastrada por la crisis
hacia la pobreza.
UN MISMO ESTADO
DELINCUENTE
Este es un
cuadro al que conduce la invasión en la actualidad. ¿Cuál es
entonces la diferencia con el pasado? Vivimos o padecemos una
sociedad en la que la masacre-exterminio es una constante. Hoy y
aquí la justicia la ejecutan los poderes comandados por un
Estado delincuente. El mismo Estado invasor que nos lega el
Estado Metropolitano y el cual no es superado por el llamado
proceso independentista, republicano, dictatorial, democrático o
revolucionario.
A lo largo de su
historia este Estado ha mantenido incólume su condición
criminal. De modo que a los 20 millones de víctimas que dejó el
proceso violento inicial hay que sumar los asesinatos acometidos
por todos los poderes de todos los rincones de un continente
tomado por unos amos-propietarios-señores que cada vez se
presentan como nuevos, renovados y apartados de todo vínculo con
el pasado invasor-colonial.
LAS ACTUALES
ATROCIDADES
En el caso
venezolano, a los 513 años del único continente que celebra su
partida de nacimiento, los “revolucionarios bolivarianos y
cristianos” condenan las atrocidades del pasado, para acometer
las del presente. Perversa y falaz forma de engaño. Esta
sociedad no ha dejado de lado en ningún momento su condición y
capacidad asesina. Porque la máxima expresión de ese
aniquilamiento está en el acto de ‘desarmada crueldad’ a que se
somete al colectivo con la imposición del hambre y la miseria.
Esta es la manera de mantener como despojo todo tipo de vida y
garantizar el mismo y permanente dominio.
DE LA MASACRE
DE CANTAURA AL EXTERMINIO DE LA GRAN SABANA
Para el
Estado delincuente y exterminador, sin embargo, como el de ayer,
siempre es conveniente intentar alcanzar la salvación. El crimen
siempre está en los otros. El presente proceso de destrucción,
a la hora de conmemorar el 23 aniversario de la Masacre de
Cantaura, acusa de criminal, a la política de Estado del
momento. Y el Golpista Presidente ordena una averiguación que
termine por establecer responsabilidades. Señala específicamente
a Herrera Campins como el gran culpable. Algo similar hace el VP
Rangel. Ellos están libres de toda acusación de masacre y creen
tener la suficiente moral para hacer acusaciones. Olvidan tal
vez situaciones criminales que los implican.
REVOLUCION
CRIMINAL
¿Puede desmentir
el GP que los militares golpistas participan como masacradores
el 27F-92? ¿Puede desmentir el VP que fue una de las voces que
se levantó para recomendar al presidente Carlos Andrés Pérez que
decretara el Toque de Queda, es decir, que mandara a matar el
27F-89 para ‘salvar la democracia’? ¿Hay responsables por los
muertos del 04F-92? ¿Y a quién corresponde la responsabilidad de
los centenares de exterminios y desaparecidos que se registran
en este expaís en los últimos seis años? ¿Y de quién es la
responsabilidad del negocio de la muerte carcelaria? ¿Cómo
ocultar que la única gran revolución que se adelanta hoy en esta
Venezuela de la sobre-decadencia corresponde a la corrupción y
al más grande de los fraudes en todo sentido y dirección?
Hoy estamos en
presencia de unos invasores que hacen del mando-poder una
instancia que los convierte en dueños del destino de una
sociedad. Los propios representantes de los invasores de 1492 y
que por tal se consideran autorizados para disponer de todo
cuanto quieran y cómo quieran de una realidad que ha dejado
atrás a Venezuela para transformarse en Venecuba, la fusión de
dos “revoluciones” en una para mantener en alto las mismas
banderas de la invasión-masacre-destrucción.
HACIA UN
COLECTIVO NO DESCUBIERTO
Pero la historia
de las miserias y los crímenes que llena hoy todos los espacios
será irremisiblemente alterada en el futuro con la acción de un
colectivo, no descubierto ni enajenado ni confundido ni
reprimido, que apunte en términos de construcción hacia otra
realidad y otra sociedad. Y ese es el ‘qué hago’ que debemos
concientizar y organizar para el presente-porvenir de este
expaís.
abm333@gmail.com