SANTIAGO DE CHILE.- El
dictador chileno Augusto Pinochet, fallecido el pasado día
10, justifica en una carta póstuma el cruento golpe
militar que lo llevó al poder en 1973, pero lamenta los
dolores que provocó, por lo cual, si se repitiesen las
circunstancias de entonces, volvería a hacerlo, pero "con
mayor sabiduría".
Tales afirmaciones están
contenidas en un texto titulado 'Mensaje a mis
compatriotas', un documento póstumo que el ex gobernante
(1973-1990) dejó a los directivos de la fundación que
lleva su nombre y que publica la prensa local.
Los directivos de la
fundación decidieron que fuese publicado este domingo por
constituir, a su juicio, "un mensaje de unidad hacia los
chilenos" y por su valor histórico.
El mensaje está dirigido a
los chilenos "sin excepción" y Pinochet expresa su deseo
de que sea difundido tras su muerte. "Quiero despedirme de
ustedes con mucho cariño. Entiendo que esto parecerá
incomprensible para muchísimos, pero es así. En mi corazón
no he dejado lugar para el odio", afirma en el texto.
"Amo a la Patria; amo a
todos ustedes. Por amor se pueden hacer muchas cosas
buenas y muchas malas. Acertadas y erróneas. Yo nunca
imaginé entrar a la gran historia de mi país, pero así
ocurrió", sostiene.
Pese a señalar que no
quiere hacer análisis mayores, lo que deja a los
historiadores, afirma que en los años 70 el mundo estaba
inmerso en la Guerra Fría y que Chile "empezó a arder y se
encajonaba, sin escape" y que "se avecinaba a una guerra
civil con miles de muertos".
Tras considerar que una
guerra es "lo peor que le puede ocurrir a una sociedad",
Pinochet afirma que la "mayoría de la población se
inclinaba por eliminar la imposición de una dictadura
marxista", en alusión al gobierno de Salvador Allende.
Agrega que hubo que actuar
"con máximo rigor" hasta conjurar cualquier extensión del
conflicto que se anunciaba, pues de lo contrario, la
acción militar hubiese terminado en un fiasco, que habría
"provocado en el pueblo por muchos años consecuencias
negativas en extremo dolorosas".
Sobre esa base, argumenta
que fue preciso "emplear diversos procedimientos de
control militar, como reclusión transitoria, exilios
autorizados, fusilamientos con juicio militar". "En muchas
muertes habidas y en los desaparecimientos de cuerpos es
muy posible que no se logre jamás un conocimiento acabado
del cómo o por qué ocurrieron", asevera.
"No se puede descargar con
simpleza la responsabilidad de un sinnúmero de
extralimitaciones porque no hubo un plan institucional
para ello. Los conflictos graves son así y siempre serán
así: fuente de abusos y exageraciones", justifica.
Sostiene en seguida que
actuó "con rigor pero con mucha más flexibilidad que la
que se me reconoce, por lo que yo siempre me refería a una
'dictablanda'".
"¡Cómo quisiera que no
hubiese sido necesaria la acción del 11 de septiembre de
1973! ¡Cómo hubiera querido que la ideología
marxista-leninista no se hubiera interpuesto en la nuestra
vida patria!", afirma Pinochet, bajo cuyo régimen hubo más
de 3.000 muertos, un millar de desaparecidos, cerca de
treinta mil torturados y más de 200.000 exiliados.
"Cómo hubiese deseado que
el presidente Allende no hubiere incubado en su ideario el
propósito de transformar a nuestra Patria en una pieza más
del tablero dictatorial marxista!", argumenta Pinochet.
"Yo voy a misa y comulgo.
Nunca dejo de pensar en las heridas abiertas", dice más
adelante y asegura que le gustaría "andar en las calles,
saludando, consolando, ayudando".
"Mi destino es un tipo de
destierro y soledad que jamás hubiera pensado, y menos
deseado", agrega, pero en seguida se declara "orgulloso de
la enorme acción que hubo que realizar para impedir que el
marxismo-leninismo alcanzara el poder total".
Su acción, acota, también
estuvo encaminada "a que mi entrañable Patria fuera una
gran nación". "De eso, nunca dudaré, sin una pizca de
vacilación. De repetirse la experiencia hubiere deseado,
sin embargo, mayor sabiduría", concluye.
Según la fundación Pinochet,
el texto original, escrito a máquina, será exhibido en un
futuro museo que se proyecta levantar.
Consulte
el texto íntegro de la carta