Este
fin de semana se llevará a cabo un proceso delator.
Esta vez no será contra la oposición, que realmente cree
poco en que la remoción del alcalde de la ciudad de
Caracas pueda lograrse, aun con una votación mayoritaria ,
a menos que lo decida el presidente Chávez. Los niveles de
indiferencia con respecto al revocatorio de Bernal, se ven
majestuosos desde la acera del antichavismo. No hay ni una
pancarta pegada en la calle de algún partido o movimiento
opositor que sugiera como acabar o pretenda agrupar a
quiénes no quieren al alcalde caraqueño.
La campaña se mueve adentro de los partidarios del
gobierno. Y es bien descalificadora, agresiva y grosera en
términos personales, como todo lo de esa corriente
política Como muestra de democracia interna, Bernal
terminó de marcar el tono de su revocatorio. Ha dicho que
quiénes lo defienden, estarán identificados por un
brazalete tricolor todo el fin de semana.
Es decir, quién no tenga el brazalete y vaya a las mesas
de votación de Caracas en pelo, se puede dar por
identificado, perseguido y despedido, antes de que Bernal
termine de salir de cargo, si las cosas le van mal, porque
estará en una lista personal, la Lista de Bernal.
En un mensaje dirigido a sus votantes, por radio y en los
espacios abiertos de la casa del Obrero en la parroquia
Sucre, recogido en la página web de la Alcaldía, Bernal,
dice que tiene tanto derecho a hacer que se identifiquen
sus partidarios, con un brazalete en las mesas, como lo
tuvieron los chavistas que defendieron a Chávez el 13 de
abril de 2002. Apartando su dudosa identificación con el
líder máximo del proceso "revolucionario", llama la
atención lo democrático de su pensamiento, su intención
declaradísima de identificar a sus enemigos, con la peor
de las intenciones.
Los controlables votantes chavistas, cobran en las filas
de las misiones, de los organismos públicos, como la
alcaldía y están inscritos en el PSUV, porque si no, no
tienen vida en el gobierno. Se les suspenden los pagos, no
se les considera para los empleos públicos, para las
becas, para la comida gratis, para los cupos en las
escuelas. Se convierten en muertos civiles si no se
cuadran totalmente con sus jefes.
Y eso es lo que propone Bernal: 1200 testigos, tres en
cada mesa y además un despliegue logístico entre líderes
comunitarios, mesas técnicas, comités de salud y tierra,
fuerzas bolivarianas de motorizados y taxistas, madres del
barrio, consejos comunales etc, etc. Quien no se
manifieste no va para su baile.
Quiénes no voten por él, aunque estén aparentemente en las
filas de la revolución, estarán en la contrarevolución: "
les vamos a dar una paliza bolivariana que no olvidarán en
mucho tiempo, para hacer respetar la fuerza de la
revolución bolivariana en Caracas".
Esos métodos, exclusivos y persecutorios, típicos del
nacional socialismo venezolano, tal y como se hace llamar
una de las corrientes políticas pro Chávez que manifestó
en estos días, son de la misma ralea de los de aquellos
que arremetieron contra la oposición que se manifestó en
los revocatorios firmando contra el Presidente , enfrente
del CNE, agrediendo a los manifestantes con palos y con
bin ladens, de aquellos que como el parlamentario Luis
Tascón armaron listas excluyentes de votantes para que sus
oponentes nunca mas consiguieran trabajo con el gobierno y
en los momentos incipientes de la persecución ni siquiera
obtuvieran cédulas de identidad o pasaportes. Son los
mismos que creen que la ciudad está partida en territorios
chavistas y opositores y que creen que esas aceras se
conquistan a palos. Los mismos que le mandan a decir a los
estudiantes "por su seguridad" que no se acerquen a la
Plaza Caracas, porque ellos mismos serán los encargados de
masacrarlos, aquellos que ensuciaron, rompieron y
bombardearon la escuela de Periodismo de la UCV, que
destrozaron la fachada de Fedecámaras, los que execran,
segregan y golpean en nombre de la revolución. No hay mas
que seguirle la pista a esta pequeña y fascista lista
local para que detallemos cuan burocráticamente y
oscuramente actua un tipo de venezolano atado a la peor de
las pasiones ciudadanas, la segregación.
lucgomnt@yahoo.es