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Enero: la ruta del hambre
por Lucy Gómez  
sábado, 3 febrero 2007



Intentan convencerme que los anuncios del Presidente no le causarán daños a mi bolsillo ni a mi estilo de vida.

Pero lo cierto es que inmediatamente que anunció que aumentaría el precio de la ga-solina, oí por radio a un dirigente de la Unión de Carros Libres y Por Puestos , que agrupa a la mayoría de los choferes de las camioneticas de la ciudad y a sus taxistas, en una "mesa de análisis" semi improvisada, recordar los tiempos en que el gobierno de la "cuarta" , con el mismo tipo de medidas les dio unos subsidios para que no aumentaran los pasajes, que cobraron por la mitad, algunos , cuando se acordaba el gobierno local de pagárselos o cuando iban a huelga porque les tenían seis meses atrasados los pagos. Otros, los choferes vivianes que nunca faltan, se embolsillaron esos subsidios porque estaban bien enchufados y sabían que no les iban a hacer nada: dejaron de salir a la calle a trabajar, defraudando a los usuarios y a quién les dio el dinero.
Después de todos los aumentos del 2005, cuando en seis meses pasamos de pagar 500 bolívares por el pasaje a 900, todos los caraqueños vieron con aprensión el anuncio del alza. Los taxistas, por su parte no tuvieron necesidad como los choferes de camionetas de esperar una convención para decidir si aumentarían o no el pasaje., no se hicieron problema. Subieron las tarifas inmediatamente.

Dos semanas después, el Presidente intentó explicar porqué el aumento de la gasolina no iba a subir el transporte público y avisó que haría una excepción con los transportistas de marras, para darle la gasolina a precios solidarios. Pero habló tarde. Los efectos terribles de su anuncio, ya habían empezado a golpear a todo el mundo.

Todos protestan además, porque Chávez dijo que los pobres iban en Metro y por eso no serían afectados por el alza. No protestan porque los traten de pobres, sino porque consideran que debe ser que el Presidente no se monta en los trenes. Todo el mundo sa-be que las líneas del metro te llevan a puntos clave de la ciudad, intersecciones, etc. pe-ro de allí, para arriba, para abajo o para los lados, tienes que ir en camionetica, si estás en días normal y si estás platudo o tienes una emergencia, en un taxi que no baja de diez mil bolívares, aunque sea " ahí mismito" y que puede llegar a 35000 y 40 000 bolívares si llueve mucho, o si hay alguna tranca que desaparezca a la mayoría del transporte superficial. Al parlamentario Luis Tascón, que le encanta hacer comparaciones con los choferes de Bogotá y otras ciudades colombianas, puede traerse una delegación del hermano país, para que se cale las locuras y los cambios de humor del gobierno venezolano a ver si pasan dos días cobrando tres mil bolívares por carrera. Por otra parte. Sólo en Caracas y Valencia hay metro (por cierto, bien cortico) ¿y el resto del país? ¿qué se lo coma el tigre?

En cuanto a las alzas en los alimentos y otros componentes del mercado semanal, so-lamente tengo que reportar que los dueños de establecimientos y puestos en los diferentes mercados, como un solo hombre, decidieron aumentar los precios de todo ( de todo lo que se encuentra, ojo) Y no lo digo yo, lo dice el Banco Central de Venezuela, que como muy bien lo explica la metodología de su encuesta , cada mes visitan mas o menos tres mil establecimientos, entre mercados, bodegas, abastos, supermercados, hoteles, restaurantes, clínicas, mercales, etc.- Los alimentos subieron 4,2 por ciento en enero, es lo que eleva el promedio de la ya altísima tabla de inflación del mes a 2 por ciento. El año pasado, en enero, los precios subieron sólo 0,8 por ciento.

Como será que en Mercal, la carne se encontraba sí, pero a 16.000 bolívares los cortes de primera y no a 7.050 como dice su propaganda, durante todo el mes pasado. Gracias por supuesto a la archirerevolucionaria ministra Erika Farías que estuvo dos meses sin importar nada, porque no es posible sostener los supermercados con la producción venezolana. Es sabido que en Venezuela, las haciendas a las que le aplican el método Chaz, es decir el barbarazo, dejan de producir. ¿Un ejemplo? El central Cumanacoa, que sigue inoperante a 16 meses de su expropiación. El azúcar está a 4000 el kilo cuando se consigue, porque el gobierno ocupa las centrales y se coge las haciendas en plena producción, lo que paraliza la producción. Lo de terror es que ahora se agarra las empresas eléctricas. Si con el azúcar desaparecida hay que entrar inmediatamente en dieta y esperar como caimán en boca de caño en las puertas de los supermercados, abastos, etc. a ver cuando aparece, para pagarla a lo que sea, todos podemos ir pasándonos a la energía solar o a las velas, con el anuncio de esa nacionalización a, porque todo lo que cae en manos del gobierno venezolano, se vuelve sal y agua y hay que importarlo.

Así pues el camino del aumento de la gasolina y de las nacionalizaciones es como el de infierno, pavimentado de buenas intenciones. En este caso, deficientemente formula-das y peor manejadas.

En conclusión mes de enero nos trajo pobreza, , porque no solamente dos bolsas de comida apenas llenas son cien mil bolívares, sino que a quiénes tenían sus ahorros en acciones de la CANTV y la Electricidad vieron salir su dinero volando por una esquina, gracias a la irresponsabilidad de los anuncios oficiales, que quieren acabar con la clase media a como dé lugar para implementar un paraíso donde todos hagamos cola en la avenida Bolívar para comprar comida y aprovechar para darle las gracias, vestidos de rojo por los favores recibidos al comandante. Ya para entonces, estaremos tan pobres, pero tan pobres, tan pobres, que sólo nos quedará como salida darle gracias al proveedor para seguir comiendo.

Y otro aparte para un comentario sobre lo que significa la estatización para los em-pleados de las empresas privadas.

Cada empresa que ahora se estatice tiene empleados que han visto durante ocho años que es ser empleado del gobierno, a menos que seas del alto perraje: bajos sueldos, uniforme rojo, obligatoria asistencia a los actos políticos pagos inestables , elección de je-fes por su lealtad al proceso y no por sus capacidades, alta rotación de personal y si no que les digan los ministros y sus cohortes, cambiadas o botadas violentamente del ministerio del Interior y Justicia, de la Vicepresidencia, del ministerio de Educación. No pueden negarlo, el socialismo a la venezolana no sólo es "inventamos o erramos", mas lo último que lo primero, sino como vaya viniendo, vamos viendo y jale bolas parejo, que hay que votar por quién nos da de comer.

lucgomnt@yahoo.es

 
 

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