Uno no sabe si reír o llorar. Ya no son 33 sino 69 artículos. Número  para quienes sólo saben decir sí y  ven todo al revés. Claro, aún no han creado la Misión  Consciencia. 

Como la guerra bacteriológica del imperialismo yanqui se introdujo vía viento en Cuba, para  contaminar con alevosía a quien se dice el rey de reyes, es posible que éste  haya traído ese virus a lo que queda de país  para contagiar a los muñecos porfiados que terminaron su misión el viernes 2,  Día de los Muertos. Con pasos firrrrrrrmmmmmm , quienes le deben hasta la manera de caminar al “ encargante ”, se dirigieron al lugar donde presuntamente se llevará a cabo la solución final. Cargaron  con su semi-muerto : el proyecto de la mal llamada reforma. Paso previo a la  preparación de la cámara de gas letal.

Sin pena. Sin gloria.  

La hoy moribunda, violada ad infinitum durante su corta vida, la que si no es recuperada prontamente en terapia intensiva, podría teñir con  sangre nuestra tierra.

La lápida que habían  preparado , según la palabra del ungido  ya no va en un bloque. Ahora fue   partida en dos para que la urna no pesara  tanto.

El futuro del  país en un hueco. 

Antes de ése doloroso capítulo, cuando escuchaba a varios de los presuntos representantes del pueblo doliente, pensé que aunque quieran borrar la historia, pasarán a formar parte de ese triste episodio  . Archivo muerto en  hojas tristes. 

No sabemos si sus hijos o nietos querrán - o podrán-  conocer sus comportamientos. Si llevarán sus apellidos con vergüenza o sin ella. Tanto cinismo junto, tanta ignorancia, tanta adulancia, tanto desparpajo. Tanta amoralidad.  

Una pseudo  izquierda mocha que llama traidores a los disidentes. Izquierda anclada en los años 60 del siglo pasado. Soviet Supremo venecubano fracasado redivivo. Neo-fascismo que pretende hinchar al Estado para terminar de reventarlo. 

Los veía y recordaba sus actuaciones anteriores. Cuando con todos los defectos, había pluralismo y respeto no sólo por el fondo sino por las formas.  Ellos participaron. Entonces hablaron.

Hoy me dieron más lástima y más grima. Dudo que esta noche puedan mirarse en un espejo que no esté distorsionado.

 

De película 

Ahora que tienen tiempo,  pues terminó el primer acto del teatro, les recomendaría ver  la La vida de los otros, film ganador del Oscar como mejor película de habla no inglesa. Ambientado en Berlín durante los años previos a la caída del muro, gira en torno a la misión que le encomienda la policía secreta del régimen comunista de la antigua República Democrática Alemana al capitán Gerd Wiesler.
A partir de esa orden, el agente de la Stasi comienza a vigilar a una pareja conformada por un escritor llamado Georg Dreyman y por una actriz Christa-Maria Sieland. A medida que Wiesler va escuchando las intimidades de los amantes a través de un sistema de micrófonos, irá describiendo en sus informes hasta el más mínimo detalle de lo que hacen o dicen los otros. En ese exhaustivo registro se irá interesando cada vez más el asunto, lo que le permitirá cambiar sus ideales y su vida por completo.
La película muestra un país dominado por el espionaje, en el que la Stasi tiene el poder de vigilar, investigar y combatir a cualquier persona que considere un “otro”. Una amenaza. Un enemigo porque piensa diferente. En ese contexto, el trío Wiesler, Dreyman y Christa-María generará un vínculo muy especial.        No les cuento el final. Atrévanse a verse cuando el futuro los alcance.

La Vida de los Otros (Das Leben Der Anderen ).Drama. Director y Guionista: Florian Henckel von Donnersmarck. Protagonistas: Ulrich Mühe, Ulrich Tukur, Martina Gedeck, Sebastian Koch, Thomas Thieme, Volkmar Kleinert, Hans-Uwe Bauer 

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