Ayer Stalin González estuvo participando de una marcha en Barquisimeto con los estudiantes de Lara. Esta mañana asistía a clases en Caracas y tenía un examen. Al salir de clases, conversamos.

-Cuando se reúnen estudiantes de Caracas, Mérida, San Cristóbal, Valencia, Maracay, Puerto La Cruz, Barquisimeto ¿cómo son los temas que ustedes tratan? ¿Encuentran coincidencias, hay diferencias, cómo lo ven?

-De que hay coincidencias, las hay. Han habido coincidencias entre discursos a nivel nacional. Por supuesto que como en todo grupo, hay diferencias con algunas cosas y se plantea la propuesta, se busca si todos estamos de acuerdo, y si no, se discute. Así funciona. Creo que la mayoría de los colectivos funciona así. Pero en general hay mucha coincidencia al plantear hacia donde va a ir esto más allá de la libertad de expresión. En el tema de la autonomía universitaria y algunos otros problemas del país hay total coincidencia en el movimiento estudiantil y creo que en todo el país, -más allá del movimiento estudiantil-, hay una coincidencia sobre lo que está pasando y sobre las opiniones que hemos dado con respecto a eso.

-¿Cuáles son los puntos de mayor coincidencia, además de la libertad de expresión y autonomía?

-Hay un punto sobre la Reforma Constitucional: que hay que abrir un debate sobre la Reforma Constitucional. No debe haber una Reforma Constitucional a puerta cerrada. Deben ser los venezolanos los que discutan esa reforma, ya que la Constitución es nuestra Carta Magna donde están las reglas del juego dentro de la sociedad venezolana. Hay la necesidad de renovar el discurso político de Venezuela y hay necesidad de acabar con la polarización y hacer un llamado a la reconciliación, a la unidad del país.

-¿Allí es donde han encontrado coincidencias entre todos ustedes?

-Sí, con respecto a esos temas, sí las hay.

-¿Hay en esos puntos coincidencias con los estudiantes chavistas, o con ellos encuentran discrepancias?

-Yo veo allí, que hay discrepancias, sobre todo con el tema de la autonomía y de la reconciliación. Ellos llaman siempre a la confrontación, a que es el imperialismo norteamericano el que está detrás de todo esto, y con el tema de la autonomía universitaria han dado su opinión en diversos sitios de que ellos no creen en esta autonomía y que la universidad tiene que ser de todo el pueblo y toda esta serie de cosas. Yo estoy de acuerdo que la universidad debe estar abierta al pueblo, yo creo que está abierta al pueblo. El problema es: cómo hacemos para mejorar lo que hay, no comenzando como que aquí no existiera nada y aquí toda la vida la universidad ha estado cerrada al pueblo. Yo estoy de acuerdo con la discusión de la Ley de Educación Superior y la Ley Orgánica, pero que sea una discusión abierta, que los universitarios discutamos eso y que no se nos imponga una ley desde un escritorio desde afuera de la universidad. Es el destino de la universidad, debe ser el universitario acompañado por el pueblo y por la gente, quien lleve la discusión adelante.

Un programa de reconciliación nacional

- En la reunión nacional de este viernes en el Estadio Olímpico de la UCV, o después de ella, ¿ustedes piensan elaborar un programa nacional de los estudiantes?

-Hay una idea sobre eso, la de empezar a trabajar sobre un programa por la reconciliación nacional, por un programa para todos los venezolanos. Creo que es parte de construir una Venezuela distinta donde entremos todos, donde quepamos todos, donde no necesitemos uniforme para poder existir en Venezuela y que reconocer al otro es dar ejemplo de democracia. Sí hay muchas ideas y hay coincidencia en que dentro de esos temas, habrá un programa por la reconciliación nacional.

-¿Hay algo más además de la reconciliación nacional para ese programa?

-Hay distintas propuestas. Eso es parte del debate y eso es lo bonito de este movimiento: que debata y nadie esté aquí imponiendo nada, y que son las Asambleas de Estudiantes, los colectivos, sus centros de estudiantes y la relación entre ellos la que debe discutir hacia donde va esto y que la discusión es parte de todos los estudiantes y que todos nos pongamos de acuerdo y cada quien tendrá un tema. Cada quien, desde su carrera, tiene una visión de cómo puede mejorar a la sociedad y que a partir de allí vamos a empezar a construir un programa para el país.

-La discusión para el programa será nacional, regional, o por universidades?

- Yo creo que la discusión debe hacerse por escuela, por universidad primero, después en lo regional y después llegamos a un acuerdo nacional, pero eso es parte del debate: si ese programa va a ser focalizado en cada localidad o en cada región. Eso lo va a decidir el movimiento y lo va a decidir la asamblea de cómo va a ser ese programa.
- En principio hay una visión de país y hay contactos sobre la sociedad que queremos, pero creo que eso debe ir teniendo debate también en las bases, desde la ciudad más pequeña, para tener su realidad concreta de cómo debe ser ese programa y esa reconciliación y esa propuesta de los jóvenes, de los estudiantes, al país que deberíamos tener.

- Para ello, ¿ustedes se comunican a través de las federaciones de centros?

-Sí, a través de las federaciones de centros de la universidad donde legítimamente se han abierto los centros de estudiantes. Hay universidades experimentales donde el gobierno prohíbe las elecciones estudiantiles, pero hay mecanismos para tener contacto con esos estudiantes. Por lo general es por la vía de federación de centros y los centros de estudiantes, que se están haciendo esos contactos y esa coordinación.

-¿Pura gente electa?

-Sí. El primer acuerdo que hay, que esté legítimamente electo y legalmente establecido y que los de las universidades van a llevar la coordinación de esto.

Un plan de largo aliento
-Siguen pensando en las marchas, pero vienen las vacaciones.

-Hasta donde llegan las marchas, la decisión la tiene el Estado venezolano. Hasta que el Estado no nos dé respuesta oportuna y adecuada de las cosas que hemos solicitado, seguirán las protestas, seguirán las marchas. Con el tema de las vacaciones creo que ha sido un consenso de todas las asambleas, que en las vacaciones seguirá la lucha. Falta todavía y nosotros esperamos que en ese transcurso de tiempo el Estado venezolano dé respuestas a las exigencias que hemos hecho y que no tengamos que seguir en las calles reclamando nuestros derechos, sino que el Estado entienda que la Constitución Nacional debe ser respetada. Esto se evalúa en el día a día, hemos hecho balances diarios de todas las cosas que hacemos y convocamos nuevas actividades y en el debido momento que llegue el proceso de vacaciones, veremos cuales son las actividades y cómo el movimiento seguirá en las calles.

-¿Ustedes pensaban ir a los barrios?

-Sí. Se han hecho algunas asambleas en Caracas, pero las hemos hecho sin medios de comunicación. Creo que los medios son necesarios, pero también no podemos vivir de ellos, porque esto no es un juicio mediático, sino que es una lucha que debe tener organización y que debe tener alternativas de comunicación además de los medios de comunicación masiva. Se han dado algunas asambleas en Caracas, en Antímano, en el Junquito, en Catia, se dio una por el Amparo, en Petare y en los pueblos del país y en algunos sitios de urbanizaciones. Se han dados esos debates y lo vamos a seguir haciendo.

-¿Es un trabajo callado?

-Es un tema donde nosotros no estamos queriendo llegar de paracaidista en ninguno de esos sitios, ahí las discusiones las están llevando estudiantes que viven en esos barrios, que viven en esas urbanizaciones y que deben ser ellos los que conduzcan ese debate, y que no haya aquí nadie extraño a esos sitios. No es trabajo callado, sino que el método es que debe haber organización y no necesariamente tenemos que tener los medios de comunicación para organizarnos y que hay que prepararse con un gobierno tan autoritario como este, a buscar un método alternativo de comunicación.
-En el día a día hemos afinado más mecanismos de información y más mecanismos de organización. Están los estudiantes que viven en esos barrios y ahí hay por supuestos gente que es de un bando o de otro, pero nuestro mensaje es que se acabe esa división.
-Lo especial es que aquí nosotros somos todos. Hay una cultura del venezolano de tratar de buscar un mesías y que los nuevos mesías son los estudiantes. No estoy de acuerdo con esa cultura, creo que aquí cada uno es un líder y cada uno debe asumir la responsabilidad de reproducir el mensaje, de buscar el debate en su trabajo, en su familia, en su casa, en el barrio, en el edificio, en la junta de condominio y que ciertamente por alguna circunstancia de la vida nos tocó a nosotros dirigir esto, pero que esto es una lucha de todos y que todos somos responsables de lo que va a pasar en Venezuela. Y que cada uno nos convirtamos desde lo que podemos ayudar, en un líder, en alguien que pueda direccionar hacia dónde va el movimiento y cómo deben hacerse las cosas.

-¿Se consideran una expresión de post-capitalismo, post-comunismo, post-todo lo anterior?

-No, yo particularmente soy alguien que cree en la izquierda y en los movimientos sociales, pero lo de las universidades es un movimiento que es muy diverso, y aquí hay diversidad de pensamiento y pluralidad de pensamiento que es lo que queremos que haya en Venezuela. No que se imponga una idea, sino que busquemos una fórmula de que en todas esas ideas de país, agarremos los puntos de coincidencias y vayamos construyendo el país que queremos así sea de la doctrina que venga, sea de la ideología que venga, sea del partido del grupo que venga, pero que todos nos pongamos de acuerdo, y que trabajemos juntos por construir la Venezuela que queremos.

-Van a tener mucha persecución, sin embargo ¿consideran que ustedes son los que van a hacer un nuevo país?

-Yo creo que aquí hay una nueva generación que no es que va a dirigir al país, sino que tiene ideas distintas y que está llegando con un mensaje distinto, a cómo debe ser ese país y que lo que estamos pidiendo no es que nosotros lo dirijamos ó que se hagan las cosas que nosotros pedimos, sino que entre todos lo construyamos y que vayamos conformando esa Venezuela que todos queremos, con la participación de todos los venezolanos, de todos los sectores y de todas las personas que viven aquí.
 

*	Artículo publicado originalmente en el semanario Zeta