Sin
enemigos
pequeños por
José
Alberto
Medina
Molero
domingo,
22 junio
2008
(a todas las selecciones
modestas)
Si
algo ha venido cincelando en los atónitos ojos de la
fanaticada mundial esta Eurocopa, es que no hay enemigo
pequeño. Los resultados de los tres primeros partidos de los
cuartos de final así lo rubrican, pero ni de esa manera tan
flagrante nos acostumbramos a la verdad. Cuando todavía se
hacían todo tipo de proyecciones para ver una final Portugal
vs. Holanda ó Alemania vs. Italia o cualquier combinación
alrededor de estos equipos tenemos ya eliminados a los
Lusitanos y a los Tulipanes, y lo sorprendente no es su
eliminación como tal sino que las mismas se produjeron a
manos de selecciones que no despertaban ningún género de
favoritismo como las modestas Turquía y Rusia, equipos que
se han crecido a fuerza de pundonor y de ganas de pasar a
instancias superiores. Pero no solo las ansias son
suficientes, eso lo sabemos de sobra. Debe haber en lo más
hondo de las escuadras, técnica, sapiencia, orden,
disciplina táctica, enormes reservas físicas y una entereza
mental a prueba de fugas en situaciones de alto apremio.
Lo que pareciera en esencia decirnos esto es que el fútbol
se ha ido cada vez más democratizándose, se ha ido
homogeneizando lenta pero incansablemente. Estos resultados
nos dicen que ese mundial que se asoma dentro de dos años
puede entrañar nuevas sorpresas.