No
son pocos, ni dejan de ser sorprendentes los laureles que ha
venido consolidando Maglio Ordoñez. Comencemos con su
reciente título de bateo en la Liga Americana, el cual
además del mérito intrínseco que comprende el obtenerlo,
encierra un mérito que lo hace más glorioso: el de haberlo
conquistado venciendo a uno de los más grandes hiteadores de
la historia centenaria de las Grandes Ligas, Ichiro Suzuki.
Pero aquí no terminan los impresionantes logros alcanzados
por Maglio. Entre éstos cabe mencionar:
o
Es líder en Slugger de todos los
tiempos para venezolanos, con un sólido 0.522 (su más
cercano rival es Abreu con 0.500).
o
Es líder en promedio de bateo vitalicio con
312 puntos, entre los venezolanos con 5000 turnos o más en
las mayores.
o
Obtuvo el liderato de mayor cantidad de hits
en una temporada para criollos (216), y mayor cantidad de
dobles (54).
o
Detenta el liderato de mayor OPS vitalicio
(0.892) y en una temporada (1.029) entre criollos con 5000
turnos ò más.
o
Se ubicó como segundo mejor empujador de
todos los tiempos para venezolanos, y en jonrones está a 5
de superar a Armas y de ese modo escoltar al líder absoluto
(Andrés Galarraga).
o
Es segundo de todos lo tiempos en % de
embasados (OBP) entre criollos.
o
Se colocó a 8 rayitas de convertirse en el
segundo jugador criollo en fletar 1000 ó más carreras en la
gran carpa.
Maglio, quién está por cumplir (en Enero próximo) 34 años,
probablemente tenga, de no atravesarse lesiones de
importancia, unas 4 temporadas en plenitud de forma. ¿Podrá
batear en esas 4 zafras los 153 jonrones, que le permitan
superar a Galarraga y entrar al club de los 400 bambinazos?
¿Logrará convertirse en el primer venezolano con 1500 o más
carreras enviadas al plato? Maglio tiene una marcada
posibilidad de lograr estas metas, ya que los números así
parecen confirmarlo: Un cuadrangular cada 21,46 turnos y
0.72 empujadas/juego (vs. 0.72 y 0.63, respectivamente de
Andrés Galarraga).
Probablemente para Maglio, desde ya uno de los grandes
peloteros de todos los tiempos en Latinoamérica, el más
importante laurel será mantenerse sano y útil para su
equipo, pues más allá de la marcas y los títulos, lo
verdaderamente importante es la satisfacción de esa
esperanza que el fanático ve instalarse en su ser, cada vez
que el pelotero de su preferencia se acerca al home
con el barquillo. Esa sensación y no otra, es lo que
atesorara ese ángel de níveas alas que es el recuerdo.
jamedina11@gmail.com