La
desesperación y el odio demostrado por los funcionarios
policiales y de la guardia nacional, especialmente la del
coronel de la guardia nacional, Antonio Benavides, al actuar
como un agente del Psuv y reprimir brutalmente la marcha
pacifica de la sociedad democrática caraqueña el sábado 22
de agosto, sin ninguna duda es por el culillo que tiene el
máximo jefe del régimen, ya está claro que el tiempo se le
agotó.
A las nueve de la mañana comenzaron a llegar los primeros
marchistas a concentrarse frente al Centro Lido ubicado en
la avenida Francisco de Miranda entre Chacaito y Chacao.
Poco a poco siguieron llegando personas por diferentes vías,
portando pancartas con consignas alusivas a los diferentes
problemas que vivimos los venezolanos.
A las
diez y media de la mañana y por el lleno que existía en las
adyacencias del Centro Lido, era un poco difícil desplazarse
con facilidad en el área, lo que obligó a los convocantes de
la marcha a ordenar la partida que nos llevaría a caminar
por la avenida Francisco Solano, pasar por la Torre La
Previsora y llegar hasta el frente de las instalaciones de
la CANTV en la avenida Libertador, nuestra armas eran
pancartas, consignas, pitos, banderas y cacerolas.
Durante
el recorrido fueron incorporándose muchas personas y las que
no lo hacían, desde los balcones y ventanas de los edificios
nos saludaban con el pabellón tricolor y con gestos de manos
amigables, Desde que la marcha salió del Centro Lido y
cuando pasó frente a la Torre de La previsora, minutos antes
de ser atacada por los esbirros del gobierno, se calcula que
ya concentraba un promedio de 250 mil personas marchando.
Al
gobierno le salió el tiro por la culata cuando creyó que
aprobando la ley de educación entre cantos de gallos y
medianoche, en plenas vacaciones escolares, iba “agarrar”
desprevenido y desmovilizado al pueblo venezolano y logrería
imponer sin resistencia la ideologización de nuestros niños
y adolescentes. Con todos los cantos de gallos y las
vacaciones escolares aplicados por el gobierno, fuimos 250
mil los que marchamos, que si lo multiplicamos por dos, es
una cantidad que pone a pensar mucho al que te conté. En mi
caso fui solo a la marcha, pero represento ocho personas,
entre hijos, hijas, yernos y yernas dispuestos a no
rendirnos, Sr. presidente.
Durante
todo el recorrido observamos personas de diferentes edades y
de todos los sectores de la Gran Caracas, mezclados y unidos
con un solo objetivo, rechazar la nueva ley de educación y
defender el derecho por una educación plural y diversa como
lo establece nuestra constitución nacional, sin métodos
comunistas cubanos que tiendan a la ideologización de
nuestros hijos y nuestros nietos.
La
marcha estaba convocada para las nueve de la mañana del
sábado 22 de agosto, con la consigna: POR MIS HIJOS YO SI
MARCHO, pero antes de las seis de la mañana todos los cruces
de calles por donde se desplazaría la marcha fueron
bloqueados por pelotones de la policía metropolitana y de la
guardia nacional armados hasta los dientes, con un
comportamiento muy agresivo y provocador.
El ministro Tareck El Aissami para justificar la emboscada a
la marcha dijo que éramos terroristas, Sr. Presidente déjeme
decirle que no somos terroristas, en cambio cuando usted da
instrucciones para que envíen pelotones de guardias
nacionales y policía metropolitanos armados hasta los
dientes y aptitud provocadora a los alrededores del sitio de
concentración de una marcha pacifica a tempranas horas de la
madrugada, eso si es terrorismo de estado.
Hablar de las conexiones del gobierno con las FARC y los
lanza cohetes capturados por Uribe. Chávez debe explicar sin
insultos ni descalificaciones. Debe explicar los
computadores de reyes y porque pidió beligerancia para las
FARC
Tereck debe explicar lo que se ha dicho de él sobre la
entrega de cedulas venezolanas en frontera cuando vivía en
Mérida y era dirigente estudiantil.
Consignas como “con mis hijos no te metas, somos periodista
y queremos informar, no me calo tu ley cubana, somos
periodistas no somos terroristas y otras tantas que por
falta de espacio no nombramos, sin embargo quiero destacar
la pancarta del CNP y el SNTP que decía: Periodismo es
Libertad, detrás de sta pancarta nos ubicamos al lado
colegas periodistas que atendimos el llamado a marchar de
nuestros gremios.
geron2ff@gmail.com