Enjuiciar
a un ex dictador no es cosa fácil, y menos si el señalado se
ha escapado al extranjero y, quien pretende ejecutar el
proceso desea conducirlo por caminos lícitos y democráticos.
Las anteriores son lecciones que se desprenden de la lectura
del libro “Juicio al dictador” oportunamente traducido y
publicado por la Fundación Andrés Mata y por el diario El
Universal. Se trata de una investigación elaborada por la
profesora estadounidense Judith Ewell sobre el proceso de
solicitud de extradición y posterior enjuiciamiento al
dictador Marcos Pérez Jiménez. Ewell, quien es una experta
sobre historia venezolana, tuvo acceso a los expedientes
judiciales tanto en EEUU como en Venezuela, por lo cual la
reconstrucción del caso está basada en información dura.
A principios de los años sesenta los delitos de lesa
humanidad no figuraban entre los que eran objeto de
persecución internacional. El asesinato político no estaba
incluido en los causales para una posible extradición, por
ejemplo. Por ello, el expediente contra Pérez Jiménez fue
sobre los delitos “menores” de peculado. Y por ello, el día
que fue condenado, el dictador salió de la cárcel para
dirigirse a su cómodo y rico exilio madrileño.
Uno de los documentos
probatorios del enriquecimiento a costas del fisco por parte
de Pérez Jiménez, da cuenta del tamaño del robo ejecutado.
Un banco de New Orleans, que recibiría una remesa de dinero
enviado por el aún presidente venezolano, le aconsejó que su
depósito no lo efectuara en una sola operación, ya que era
tal el monto de bolívares a cambiar que generaría una
devaluación de la moneda venezolana…
Informes del 3D
El pasado viernes, el tema de las elecciones presidenciales
del 3D nuevamente fue objeto de atención ante la
presentación pública del informe de los observadores
electorales de la Unión Europea, y por la simultánea
distribución de un informe elaborado por Sumate.
El informe de la UE había sido
entregado dos días antes a la directiva del CNE y al
vicepresidente ejecutivo, con lo cual la diputada europea
Mónica Frassoni se curó en salud, entregando el texto al
gobierno antes de su difusión pública. Frassoni,
euro-diputada, italiana y del partido verde, se reunió tanto
con Manuel Rosales como con partidarios del gobierno a quien
comunicó las conclusiones de su trabajo. Por cierto, una
reunión convocada por la señora Frassoni con directivos de
medios de comunicación fue virtualmente boicoteada, tanto
por los medios privados como del gobierno, los cuales habían
confirmado su asistencia. El único asistente a la reunión
fue el Director Ejecutivo de El Nuevo País. Al parecer el
informe escrito de la UE ya se había filtrado y su contenido
causó ronchas tanto en el gobierno como en medios privados.
El informe de Sumate concluye
que las elecciones del 3D no fueron limpias, libres ni
transparentes. Al igual que el informe de la UE, el equipo
de Sumate se detiene en la utilización del aparato
gubernamental a favor del candidato-presidente Chávez, hecho
que ejemplifican con la actividad proselitista desarrollada
desde Pdvsa.
Aparte de las conclusiones electorales que se desprenden del
informe Sumate, las recientes apariciones en varias partes
del país, de María Corina Machado, así como el lenguaje que
ella y otros directivos de esa organización están
utilizando, hace pensar que Sumate pronto emigrará a la
condición de partido político o por lo menos de organización
política. Ya la señora Machado ha adelantado que su
organización no quiere formar parte de alguna “plataforma
unitaria”, lo cual en pocas palabras significa que Sumate ya
está en la vía de abandonar su papel de ONG de apoyo
electoral para transformarse en otra cosa. Las
consideraciones de Sumate a propósito de la Ley Habilitante
y otros temas de actualidad, hacen suponer que María Corina
saltará de lleno a la arena política.
El informe electoral de la UE
trae una interesante evaluación de los temas que fueron
tratados por los dos principales candidatos en las
elecciones presidenciales pasadas. Las cifras proceden del
monitoreo de medios audiovisuales.
Los mensajes del gobierno privilegiaron los temas de “salud
y desarrollo social” y “educación”. Todos los demás temas
fueron presentados marginalmente. Por su parte, la campaña
de Manuel Rosales dedicó sus mensajes básicamente a tres
aspectos: “economía”, “trabajo y desempleo” y “política
interna”. A la misión europea, según comentara la diputada
Frassoni, llamó poderosamente la atención que el asunto de
la inseguridad no fuera tratado en la campaña, siendo uno de
los aspectos críticos según buena parte de la población
venezolana.
Las cifras presentadas también confirman la bajísima
relevancia que el tema “corrupción” tuvo en los meses de
campaña. El gobierno poco habló de corrupción, y la
oposición colocó ese tema en un lejano quinto lugar en el
ranking de sus argumentos electorales favoritos.
Especial atención prestaron los
europeos a la cobertura dada por el canal oficial VTV a los
asuntos políticos, en medio de la campaña electoral. Esta
relevancia responde al carácter de bien público de las
televisoras del Estado y a la teórica mayor obligación de
mantener el equilibrio informativo, según nos explicaron los
autores del informe. Según ellos, VTV dedicó el 86% de su
tiempo de información política (sin incluir la publicidad) a
presentar la candidatura oficial. Rosales sólo recibió el
14% del tiempo de VTV, y más del 70% de las veces el mensaje
sobre Rosales fue “predominantemente negativo”.
Las cifras de los canales privados muestran una situación
“inversa”, retratándose así la alta polarización política
reinante en el país.
¿Misiles o aviones?
La firma de un acuerdo entre los gobiernos de Venezuela e
Irán para la construcción conjunta de aviones no tripulados,
causó cierto sobresalto en analistas de temas militares de
la región latinoamericana. Dicho acuerdo que ya fue aprobado
por la Asamblea Nacional de Venezuela y publicado en la
Gaceta Oficial del 29 de enero, contempla la construcción de
aeronaves identificadas como Fajr-3.
Bajo la denominación de Fajr-3 se conoce un tipo de misil de
fabricación iraní (45 km de alcance), el cual ganó
notoriedad por haber sido usado el año pasado por la
organización Hezbolá contra Israel. Pero también bajo la
denominación Fajr-3, una empresa iraní comercializa aviones
de uso civil sin connotaciones bélicas directas.
El acuerdo se refiere explícitamente a “aeronaves” y no a
misiles, pero las sospechas de algunos siguen presentes.
Al parecer, el modelo de avión no tripulado Fajr-3, es un
proyecto que recibió autorización en el 2006 para ser
ejecutado, sin que materializara hasta ahora. Venezuela
entraría como financista de una etapa de “desarrollo” del
equipo y no como comprador de tecnología ya existente.
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Artículo publicado originalmente en el diario El
Nuevo País |