A
muchos les sorprende el empleo,
sobre todo en los medios de comunicación, de la palabra
“plagio” con el significado de “secuestro”. No hay motivo
para esa sorpresa, pues dichos vocablos, ciertamente, son
sinónimos.
En efecto, el DRAE registra “plagio” y “secuestro” como
acción y efecto de “plagiar” y “secuestrar”,
respectivamente. Y define “plagiar” como “1. tr. Copiar en
lo sustancial obras ajenas, dándolas como propias. 2. tr.
Entre los antiguos romanos, comprar a un hombre libre
sabiendo que lo era y retenerlo en servidumbre. 3. tr. Entre
los antiguos romanos, utilizar un siervo ajeno como si fuera
propio. 4. tr. Am. Secuestrar a alguien para obtener
rescate por su libertad”; y “secuestrar” como “1. tr.
Retener indebidamente a una persona para exigir dinero por
su rescate, o para otros fines. 2. tr. Tomar por las armas
el mando de un vehículo, ya sea un avión, un barco, etc.,
reteniendo a la tripulación y pasaje, a fin de exigir como
rescate una suma de dinero o la concesión de ciertas
reivindicaciones. 3. tr. Depositar judicial o
gubernativamente una alhaja en poder de un tercero hasta que
se decida a quién pertenece. 4. tr. Embargar judicialmente.
5. tr. Impedir, por orden judicial, la distribución y venta
de una publicación”.
Como se ve, la 4ª acepción de “plagiar” coincide con la 1ª
de “secuestrar”, por lo que en esas acepciones dichos verbos
son sinónimos. Lo son, igualmente, los adjetivos/sustantivos
“plagiario” y “secuestrador”.
Esto se explica porque “plagio” deriva del vocablo latino “plagium”,
que significa “venta de hombres libres como esclavos”. La
acepción referente a la apropiación de obras y pensamientos
ajenos presentándolos como propios aparece después.
“Secuestrar”, a su vez, deriva del verbo latino “sequestrare”,
que significa “depositar judicialmente en poder de un
mediador”, a lo que agrega más tarde, ya dentro del
Castellano, las demás acepciones registradas en el DRAE.
Es importante saber que las palabra en cualquier idioma,
pero especialmente en el nuestro, no tienen un solo
significado, sino generalmente varios, aunque haya uno o
más que sean los más comunes y corrientes, y por eso los más
conocidos. La consulta oportuna del diccionario evita las
dudas y sorpresas.