Inicio | Editor | Contáctenos 
 

De mal en peor
por Alexis Márquez Rodríguez
viernes, 30 noviembre 2007


Aun a riesgo de ser calificado de ingenuo, sigo creyendo  que entre quienes respaldan al comandante Hugo Chávez y apoyan su gobierno hay gente honesta, de buena fe, bien intencionados, que no lo hacen para obtener prebendas, ni para cuidar posiciones que  les produzcan jugosos dividendos, como sí lo hacen la mayoría  de los que ejercitan ese respaldo y apoyo desde posiciones burocráticas, parlamentarias, judiciales, electorales, etc. Sujetos corruptos, o bien porque aprovechen su situación para  robar y enriquecerse saqueando sin pudor ni escrúpulos las arcas públicas, o bien porque, sin necesidad de hacerlo, se limitan a cuidar sus sueldos, calculados en decenas de millones mensuales, cantidades que ellos mismos, casi siempre, se han asignado. Lo cual es también una otra manera de ser corruptos.

Entre aquellos “chavistas” honestos, de buena fe y bien  intencionados tengo conocidos, y hasta viejos y buenos amigos y compañeros de antaño. Casi todos apoyan el eufemísticamente llamado “proceso” desde afuera, desde sus posiciones en el sector privado, en la docencia u otras actividades no gubernamentales. O incluso en cargos oficiales de menor cuantía, en los que devengan sueldos miserables, a despecho de un denodado desempeño en sus funciones.

Confieso que no acabo de entender por qué gente así se mantiene en un irracionalmente terco respaldo al  comandante y sus ejecutorias. Porque ya no puede dárseles el beneficio de la duda, ni suponer que están allí engañados, o con el  deliberado propósito de darle al autócrata de Sabaneta todavía una última oportunidad, quizás sin percatarse de que, por lo ocurrido hasta hoy, estamos ante lo que realmente es un caso  sin remedio, en cuya rectificación es imposible confiar. Los acontecimientos de las últimas  semanas, dentro y fuera del país, demuestran que, por lo contrario, las cosas  van de mal en peor, como solía decirse antes frente a un mal  que, antes que retroceder, mas bien se acentuaba cada día.

Lo dicho hasta aquí explica que, como se ha venido  rumorando desde hace algún tiempo, muchos “chavistas” rechazan el proyecto de nueva constitución que se  someterá  a consulta popular el próximo domingo, y se disponen a votar  “NO” en el referendo. Esto tiene para ellos la ventaja de que, sin necesidad de romper abruptamente con Chávez y el chavismo, podrán liberar sus conciencias y recuperar, al  menos en parte, la sindéresis que al parecer habían  extraviado, al mantenerse en una posición insensata de respaldo a una gestión de gobierno irremediablemente signada por el disparate, la corrupción, la ineptitud y el fracaso, y por ello de un alto grado de malignidad.

¿Cuántos y cuáles de mis amigos “chavistas” honestos y de buena fe estarán entre quienes votarán “NO” este domingo? Vehementemente desearía que fueran todos. Ojalá que su actitud en ese momento no avale la creencia de otros que, al  leerme, me atribuirán, con benevolencia o con acritud, una  buena dosis de ingenuidad.

Nunca un NO ha sido tan afirmativo como ahora, cuando el SÍ se ha tornado tan negativo.


© Copyright 2007 - WebArticulista.net - Todos los Derechos Reservados.