Es
muy curiosa la evolución semántica de la palabra
“badulaque”. Su 1ª acepción en el DRAE es la de “Afeite
compuesto de varios ingredientes, que se usaba en otro
tiempo”. Tal significado se remonta al siglo XVI. Poco
después agrega el significado de “Chanfaina”, en el sentido
de cierto tipo de guisado (Ib.). Pero a mediados del siglo
XVII pasa a significar también “Persona necia,
inconsistente” (Ib). Esta última acepción la define
Corominas en su “Breve diccionario etimológico de la lengua
castellana” mas bien como “bobo, necio”. Aunque este mismo
autor lo da como de “Origen incierto, probablemente
mozárabe”, la Real Academia da como seguro este origen, pero
haciéndolo derivar a su vez de la palabra coloquial latina “portulaca”,
que significa “cucaracha”, y también “corredera”.
El “Diccionario de Autoridades”, primera edición del DRAE
(1726) registra como 1ª acepción de “badulaque” la de
“Guisado de carne menuda, dividida y cortada en pedazos
pequeños, y con el caldo espeso, el que se compone de
livianos y bofes, como lo que comúnmente se llama chanfaina
(…)”. Y como 2ª acepción este diccionario registra:
“Metafóricamente, y por alusión al guisado, que es de poca
sustancia, se llama [badulaque] el que es medio bobo, de
poca o ninguna actividad y maña, inútil, y de ningún
provecho”.
“Badulaque” figura también en el precioso “Tesoro de la
lengua castellana o española” (1610), de don Sebastián de
Cobarruvias, definido como “Guisado de carne menuda,
dividida y cortada en pedaçuelos con el caldo o la menestra
espesa (...)”.
Aunque aquí “badulaque” nunca ha sido muy usado, antes se
empleaba más que ahora. Recuerdo haberlo oído a mi padre,
que no era hombre de gran cultura, pero tampoco un rústico,
y sí un excelente lector. En todo caso, en Venezuela este
vocablo tan expresivo siempre se ha empleado como “Persona
necia, inconsistente”, o, según la definición de Corominas,
“bobo”. Incluso se percibe en su uso cierta connotación de
incapacidad o ineptitud en lo que se hace o deba hacerse.
También entre nosotros se usa “chanfaina”, pero nunca, que
yo sepa, como equivalente a “badulaque”. Tampoco sé que aquí
se haya llamado así un determinado afeite.