Las
guerras civiles las inician los militares. Y se llaman
civiles, me imagino, porque la mayoría de las victimas las
ponen los inocentes, sin uniforme, que nada tuvieron que
ver con el desencadenamiento del horror, del abrir esa
caja de Pandora, que contiene todas las miserias del
espíritu humano, empezando por la soberbia de los
gobernantes, con su cortejo de adulantes enriquecidos
mediante el dolo.
Cuando la sangre de muchos se une a la tierra y hace
barro, los que inician los conflictos amasan con ese fango
las fortunas peor habidas. Las sonrisas de los niños y la
alegría de vivir de millones, son cegadas para siempre,
como tributo a la codicia de un demagogo que se creyó
salvador de sus esbirros, que dirigen desde lugar seguro,
a las huestes ignorantes que le aclaman mientras dura la
rebatiña, hasta el momento en que por 200.000 bolívares
mensuales, no arriesgan la vida sino lo fanatizados hasta
el paroxismo…que son cada vez menos.
En los últimos meses, la partidización abusiva, ilegal y
repugnante de nuestras FFAA venezolanas, por parte del
irresponsable que dirige el gobierno, el régimen y el
Estado, ha abierto definitivamente el camino irreversible
hacia la confrontación armada interna.
La situación nacional marcha sobre dos corrientes, una
aparentemente más rápida (la confrontación política) que
la otra (la confrontación militar alimentada por la
anterior).
El destino, que quisiéramos fuera irremediable, para
evitar la mortandad futura, es que la política gane rápido
terreno, aislando aun más, al mandón, de la mayoría
nacional y de su tentación de atizar un conflicto militar
interno y externo.
Haciéndole tragar su fraude constitucional en ciernes,
tenemos la gran oportunidad de evitarle al país volver a
décadas de barbarie.
La fractura de las FFAA luce ya inevitable. Los oficiales
que soportaron de todo, con tal de no verse envueltos en
un riesgo mayor, por insubordinación, resistencia o
mezclados a procesos conspirativos, ahora tienen la
certeza, que deberán abandonar su profesión militar, si no
quieren asumir el hecho, que mas pronto que tarde, Chávez
intentará provocar una inmensa purga, a partir de un
cimbronazo militar, con el que buscará controlar, a sangre
y fuego, con sacudidas y alcances de tal gravedad, que le
permitan pasar definitivamente, a la destrucción de estas
FFAA, y refundarlas como primera institución dictatorial,
abierta y totalitariamente comprometida con su régimen
despótico.
La mayoría en el país cree, que ese proceso de hacer
"rojas rojitas" a las FFAA ya concluyó, por vía de la
compra masiva de oficiales, o por el simplismo de creer
que lo que está en juego, trata solo de resolver dilemas
entre cobardía e intrepidez.
Sin embargo, mi convicción y la de otros, entre ellos
supongo la mayoría de oficiales de las FFAA, , es que a
partir de lo que es todavía una gran evidencia, este
proceso de riesgo máximo, sólo ahora entró en una fase
decisiva, al convertirse en cualitativo, desencadenando
las fuerzas, que Chávez cree están ya maduras, para no
vivir mas con su alma en vilo, pendiente del golpe que no
llega o del magnicidio hipotético, que en estricta lógica,
solo puede venir de sus círculos íntimos, de sus anillos
de seguridad, que cambia por motivos y velocidad
enloquecidos.
El mandamás lleva adelante meticulosamente sus planes,
como si estuviera en el primer mes de su mandato, porque
su codicia lo mantiene en actividad febril, pero ya como
caudillo caprichoso y fariseo, por fin tiene el sol en la
espalda.
Ya malbarató dos tercios de su capital político y
despilfarró como nadie en la historia venezolana, la
posibilidad de hacer un excelente gobierno, de ruptura con
vicios del pasado y abriendo creativamente las puertas a
un gran desarrollo económico y social, de no haberse
intoxicado con el virus castrista senil y esa ciega pasión
pueril por el poder absoluto.
Por estas razones estoy convencido, ahora más que nunca,
que si Chávez intenta, a marcha forzada, una conversión de
las FFAA en milicia castrista, le va a salir el tiro por
la culata.
Dicho desde otro ángulo, hasta ahora solo hubo toda clase
de alcahueterías y oportunismos de los altos mandos,
aupados por un sector cada vez más numeroso de adulantes y
manoseados. Estos son tantos en número, como otros todavía
dignos, aunque menguados, que lograban mantenerse con la
boca cerrada y tragando vidrio molido.
Podían muchos hasta resistir y disimular, antes de optar
por ser serviles, amen de profesar incondicionalismos,
pero es un hecho, que por lo menos un buen 30-40% entró en
complicidad activa o pasiva, con el mecenas corruptor, que
premia a sus áulicos con gratificaciones, que van desde
privilegios insolentes, hasta dotarles, por vía de
prevaricación de fondos públicos, de gigantescas fortunas.
Pero el mandamás ahora quiere, en las FFAA, un nivel de
docilidad tal, a su plan político macabro, que solo hay
lugar para quienes quieran convertirse en esbirros de su
régimen.
El mamotreto institucional del régimen chavista, está
entrando en una nueva etapa y cambiaría su naturaleza, si
ya una vez maniatados todos lo poderes, el tipo logra, con
su nueva constitución dictatorial, ir directo a una fase
victoriosa de conflicto abierto en las FFAA, pero eso no
lo tiene garantizado de antemano y por ello anda como
alumbrado y en estado de furor insoportable, según relatan
hasta sus ministros, a quien les quiera oír.
Ese pleito ya está en curso, a lo cual él le agregó su
distanciamiento diplomático con decenas de países, que ya
denuncian sus tropelías. Y en el plano interno, contra la
iglesia, la educación privada, la propiedad privada y
empresarios refractarios, la familia como institución de
formación y de indelegable patria potestad de sus niños,
todos los medios informativos independientes que queden,
el ejercicio privado de la medicina etc etc.
Ya el chafarote hizo irremediable, con sus mítines en los
cuarteles y con el llamado a desconocer la jerarquía
católica, que está intentando provocar un conflicto
interno de nuevas características, con los que sueña
barrer físicamente a toda la oposición: la política y la
de instituciones y gremios, de la sociedad democrática, en
simultaneidad o ayudado por un plan de conflicto
geopolítico.
Esta aventura bélica que necesita Chávez agónicamente,
como pretexto para realizar a contragolpe su revolución de
fase aguda confrontacional, en lo interno y a lo externo,
necesitará cualquier pretexto patriotero tramposo, que le
permitiría, según su plan, sojuzgarnos a todos,
erigiéndose él, como representante de toda la nación
"agredida", por el imperio, o por países ahora amigos y
convertidos luego en agresores y factores de guerra, por
cuenta del imperialismo norteamericano, según le dictarán
sus parámetros ideológicos y provocaciones locoides.
Esta llegando la hora en que millones de venezolanos nos
convertiremos en "traidores a la patria"…de Chávez no de
la nuestra que quiere vivir en paz con sus vecinos y
aliados comerciales.
Te participo que si inventas una maldita guerra,
sobraremos los derrotistas, que consideraríamos el triunfo
del "enemigo" como el mal menor, siguiendo el ejemplo de
tu admirado Lenin y los bolcheviques, que llegaron al
poder gracias a inducir a la deserción masiva.
Está madurando amigos lectores, una situación donde
cambiará drásticamente lo que hemos presenciado hasta hoy,
ese juego político conocido, de creciente manipulación
fraudulenta del poder estatal, pero donde el régimen tuvo
que resignarse a cohabitar con los rasgos, aun
sobrevivientes, de la cultura democrática heredada.
Lo que aún queda de la descentralización política y
administrativa, él amenaza con pulverizarlos, al igual que
los espacios de libertades, como las autonomías
universitarias, funcionamiento normal del culto católico,
sobrevivencia de un gran espacio de la educación privada,
ejercicio de la abogacía, en la medida en que aun
subsisten los códigos civil, mercantil y penal, los
tratados, contratación, vida gremial etc.
TODO ello querrá ser barrido para constituir un estado
totalitario de economía estatista mezclada con capitalismo
salvaje. Eso fue lo que vivió Nicaragua bajo el Sandinismo,
donde sobrevivían espacios para la propiedad privada, de
solo aquellos empresarios que bajen la cerviz y cierren la
boca. Algunos, hasta con apellidotes, ya están practicando
y otros ya están sobrados, tras largos años de sumisión
perruna.
Esta visto que hasta en la URSS, la gigantesca burocracia
policial, pudo coexistir con la enorme mafia y necesitarla
en el mercado negro, que llegó a surtir una parte
mayoritaria de muchos artículos de consumo, por vía
extralegal.
La China aun comunista, por su régimen político, y la
propia Cuba Castrista, a la que le pagamos su reinserción
en la economía capitalista mundial, al subsidiarles entre
3 y 4 mil millones de dólares anuales, que hasta les ha
permitido ver crecer su economía, por primera vez en 20
años, son pruebas fehacientes de gran escala, que Chávez
si puede coexistir, aún con su disparatado proyecto
empobrecedor, con todo aquel capitalista que le admita que
se subordina y se entrega, a las fauces de su régimen
dictatorial comunistoide.
PERO, PERO, para hacer eso, Chávez necesita sus nuevas
FFAA y para refundarlas, quiere lógicamente barrer las
existentes, porque al cabo de 8 años y medio, según
confesó Muller Rojas, todavía Chávez está lejos de tener
asegurada una real hegemonía ideológica y es esa la razón
por la que el conflicto interno es inevitable, sobre todo
si el mandamás quiere forzar ahora su cubanización a
fondo, mediante una purga masiva, con telón de fondo de
muchos tiros, y donde si cualquier bando calcula mal sus
pasos, el país entero se nos incendia, abriendo la brecha
mas temprano que tarde, a un conflicto armado regional,
porque lo único absolutamente seguro, es que ningún
vecino, ni tampoco USA, tolerarían a un enajenado
reprimiendo en masa un país entero y armándose hasta los
dientes y en plan guerrero de libertador socialista de
América Latina.
Venezuela es una presa demasiado suculenta, que cualquiera
puede aspirar a echarle un gran mordisco, después que un
irresponsable como este presidente, ha postrado a límites
insospechables la defensa y apresto militar y provocado
tal nivel de desarticulación institucional y fractura
social.
La tesis que sostengo, es que la mayoría militar, antes de
verse obligada, o tentada a mantener este liderazgo de
Chávez, en plan belicista externo, como segundo paso
irrefrenable, luego de querer convertir las FFAA, en una
legión socialista miliciana, esos miles de oficiales,
preferirán mandar al carajo al que te conté, y solo tienen
para ello algunos pocos meses. La opción es que se nieguen
o actúen, como un ejército de ocupación, sobre la propia
población civil, a la cual le encasqueten este militarismo
asfixiante y explosivo.
Tengo el gran pálpito, basado en nuestra propia
experiencia histórica, de demasiadas lecciones, que, en
lugar de ofrendar sus vidas por estos disparates y este
disparatero, con absoluta certeza preferirán, mientras
puedan escoger, dar la consabida patada histórica.
Son ellos los pueden evitar matarse por miles, para dar
sustento al delirio militarista de este enajenado caudillo
de pacotilla, y son ellos los que pueden ayudar en
primera, segunda, o tercera fila, no ando en pronósticos,
a devolverle la paz, el sosiego y la vida en democracia a
los venezolanos.
Mientras Chávez no ejecute exitosamente este plan de
conversión del régimen, a partir de las FFAA, en un estado
totalitario, la lucha política abierta podremos seguírsela
imponiendo como contención, porque no puede, ni podemos
hacer otra cosa, estando nosotros comprometidos con la paz
de nuestros ciudadanos y el maniatado, como aún está, bajo
la ubre del capitalismo petrolero rentista, que genera
fortunas a sus chivatos y sobrevivencia al estado chulo
castrista, siendo sus contrapesos aun poderosos nuestra
sociedad democrática y la inserción mundial de Venezuela
como gran proveedor de hidrocarburos, bajo conveniencia de
USA y ellos de divisas a Chávez…
Si el régimen logra imponer un modelo militarista
totalitario de estado, que puede arrasar sectores enteros
de la economía privada y al grueso de nuestras formas de
vida ciudadanas sustentadas en las libertades, fue porque
antes las FFAA fueron reconstruidas como pilar miliciano
castrista de ese proceso y es precisamente el forcejeo
armado, para inclinar la balanza, o resistir ese plan
castrista, lo que determinará la virulencia del conflicto,
que puede estallar como inicio de la guerra civil, que por
lo visto la única manera de evitarla es sacando antes del
poder a Chávez, que sería el portador y factor
desencadenante de esa maldita conflagración.
franceschi1947@gmail.com