¿Que
tienen en común estos tres personajes tan disímiles como
importantes, en nuestro pasado reciente? Pues que estamos
donde estamos, para bien o para mal, entre otros, gracias
a ellos.
Sin estos tres operadores políticos de primera línea, la
suerte del mandamás ya le hubiera condenado a perder la
presidencia y convertirse en un agitador con mucho real
mal habido, peleando por visas negadas y vociferando hasta
quedarse solo con los que pague, y así indefinidamente
hasta atravesarse en una mala pasada, a algún gobierno que
le cobrará cuentas gruesas de sus caprichosos fanatismos,
o a alguien a quien arruinó, o afecto gravemente, su
experimento demencial, anti venezolano y anti-occidental.
Yo se que ya es muy difícil en nuestro país, exponer
propuestas y discutir de política, guardando todavía
obligados equilibrios, por eso pido muchas veces a mis
lectores ser leído entre líneas, porque quien comparte,
como es mi caso, la defensa de una parcela, hoy
minoritaria de la oposición, no puede aspirar, como
también es nuestro caso, a dirigirla, sin los obligados
respetos, mas que a los portavoces, a la gente que sumó
sus lealtades o credulidades estos años, a determinados
referentes mediáticos.
Quise decir en criollo, que a mi me gustaría también
mentar madres, y mandar al carajo a prominentes, pero no
quiero arreglar cuentas con mi hígado, sino entender entre
todos QUO VADIS, a donde vamos, porque hasta aquí nos
trajo la “antipolitica” de los años noventa, que era la
respuesta contra la Cuarta que sucumbía o hacían sucumbir,
y sobre todo el diseño para nuestro presente, ahora
aborrecido, que decidieron imponernos y sostener, ese trío
que “adorna” mi título. Definitivamente tenemos manía por
los tríos.
Aun recuerdo, 72 horas antes de los comicios de 1998, la
imagen vívida, dentro del estudio de Venevisión, de Peñita
tratando de destruir al único candidato que podía ganarle
a Chávez, ya posicionado como ganador, por voluntad de las
bases adecas y copeyanas, en deserción de pánico de las
clientelas fenecidas.
Se cumplía la tramoya final del diseño predeterminado, del
que veía complacido, con los brazos cruzados su obra de
magna duplicidad, porque nos dijo al terminar el programa
en vivo, que tuvo que bajar desde su oficina de
presidencia, para hacerle presente a Peñita que debía
respetar al Dr. Salas.
Hasta yo que me la doy de avispado le creí, para después
tener que ver mi país en vías de destrucción y costarme
entender, que aquellas imágenes de la coreografía humana,
que rodeaba aquel programa, que incluía el magnate
supuestamente preocupado, fue hecho obscenamente a favor
de Chávez, desde la mas alta sintonía en años esa noche,
representando la pantomima de uno de los llamados poderes
facticos, de una colosal fortuna transnacional, que elegía
su campo desde de su colosal poder mediático.
Cuando un bolivarianito me ronca, con una de esas frases
pomposas sobre la “revolución”, sólo me queda verle con
conmiseración y preguntarme ¿sabrá este que “su”
revolución se la deben sobre todo a Cisneros? .
Ruego que no se me suponga la ligereza de creer, que
Chávez no había logrado para mediados del año electoral
1998, un piso social firme, para sus demenciales proclamas
desde el “por ahora” del 92 magnicida y felón, y el
sobreseimiento oxigenante, que le sacó de Yare y disputar
las hasta allí renuentes voluntades a seguirle, en su
itinerario, hasta esta gran frustración de su revolución,
hecha solo para convertir en magnates a su mafia de
incondicionales militaristas, y muy prósperos a su casta
de burócratas de origen izquierdista, que solo eran
lambucios de las migajas de la Cuarta Republica, por
mediocres y no por perseguidos.
Cuando Cisneros pide, desde su magnificente yate, que
pongan al teléfono a Chávez para él a su vez colocar al
habla a George BUSH padre, y pedir la tregua, que Cisneros
vendrá a pactar, con Carter de padrino a Fuerte Tiuna, en
medio del secreto imposible, porque Chávez mandó a filtrar
la noticia de la postración, ya habían pasado cinco años,
desde el alineamiento de Venevisión con el proyecto de
Miquilena, Tobías Carrero, José Vicente Rangel, Miguel
Enrique Otero, Peñita y muchos otros nombres conspicuos.
En ese quinquenio habían pasado demasiadas cosas luego de
que “habiéndose negado el zambo” a cumplir la palabra
empeñada en tiempos de campaña, y habiendo el magnate
querido cobrarla el 12 de abril de 2002, prohijando la
insolencia de manipular y embaucar, la gesta libertaria
del 11, que hizo estallar la cúpula del poder y tumbar al
pichón de déspota, vaya usted a saber lo pactado en
ocasión del RR burlado como victoria opositora
indiscutible y convertido en miserable derrota bajo los
auspicios del canalla Carter a sueldo de petroleros nazis
sauditas y tejanos, los mismos de grandes amistades en la
Casa Blanca.
¿Porqué los tres nombres del titulo están juntos? Pues
sencillamente por el 3 D.
Hay dos maneras de ver la política. Una apasionada e
ingenua y otra gélida calculada y de complicidades
insondables.
Aunque les parezca mentira a muchos, he pertenecido por
años al primer sector, pero he logrado por fin entender
que todo lo que vemos es apenas un decorado. Para los que
despachan fácil las cosas no solo hay compraventas, hay
sobre todo conveniencias de opciones de vida, obligadas
por circunstancias o grandes intereses, que no son
consejeros de mucha honradez en la palabra menos aún en
los actos.
La salida de Rangel del círculo íntimo del poder
gubernamental, hacia un sitio desde donde él aspira sumar
aun mas poder, del que tuvo en la Vice-presidencia, busca
por fin alinear todos los astros, que se le desordenaron
transitoriamente.
El primer cimbronazo se dio con la partida, el 2001, de
Miquelena, su alto pana desde los tiempos de URD, y padre
político de la criatura de Barinas, luego vinieron los
sustos de Abril del 2002, que los pasó protegido en la
mansión del Country que suponen, mas tarde, las febriles
negociaciones para mantener a raya el paro cívico
suicida-indefinido, y finalmente dos años mas tarde,
cuando perdió Chávez el RR el 15-08-2004, y él debió dar
las garantías para que el presidente no se marchara y de
acuerdo a grandes banqueros permanecer, como mejor
hipótesis hasta las elecciones del 2006.
El equilibrismo no aguantó el fraude fraguado y “cobrado”
del 3 D. Chávez nunca cumple lo pactado... Habrá que hacer
lo mismo con él, se dicen, y empezó la cuenta regresiva
cuando, se va de nuevo al “punto de inflexión” donde se
tranca la economía vudú e implosiona la base política del
régimen.
Miren lo que dicen grandes dueños de medios, en el resto
de América Latina: “Cisneros nos metió en esa aventura del
12 de Abril y debimos aguantar la campaña de calumnias de
Chávez, tragando entero, para luego verle, con Carter y el
viejo Bush de chaperonas, armando su pacto de
reconciliación y complicidades. Seguiremos apoyando la
causa de la libertad en Venezuela, pero casi ponemos la
condición es que no tengamos que toparnos con ese
monumento a la duplicidad que es Cisneros”
No despachen por favor con simplismos de come candelas lo
que digo sobre los grandes grises, que opacan la
polarización necesaria y vital, que nos llevará a un mejor
futuro si logramos esta vez no tener que pagar de nuevo el
peaje, de los viejos mañosos de la Cuarta que aún dirigen
todo…gobierno y oposición, unos con dinero y otros con
televisión...
franceschi1947@gmail.com