Nuestro artículo La enmienda-trampa está montada (UN, 14/02/09) fue la síntesis de publicaciones en las que sostuvimos que el referendo sobre la enmienda es convocado con plena seguridad en el triunfo. Los Stalin, Mugabe, Castro o derivados no pierden elecciones.

El 15F se jugaba aquí el destino del jefe único de un proceso que desde el 15Ag.-04, dejó atrás buena parte de sus vínculos con ‘el imperio’ para tomar la vía cubana y alcanzar el ‘cambio para siempre’.

Otra vez triunfó la línea establecida desde el 2003 por la élite política cubana que comenzó por montar las misiones y demás formas de “justicia social” para ganar adeptos e impedir la revocatoria del golpista-presidente (GP). El 04/06/04 se convoca ese referendo con el carácter de batalla imperdible.

Y al dar sus frutos el fraude-trampa el 15Ag.-04 se impulsa la creación de Venecuba: una sola línea y dirigencia política para las dos “revoluciones”. Y lo primero que se decide es la aplicación de la violencia en la experiencia bolivariana, pero en un contexto de democracia que incluiría las ‘elecciones libres’, con seguro y fijo ganador.

Se mantiene así el señalamiento del GP de que ‘todo es una guerra’ y que aquí ‘la salida es violenta’ (ABM, Habla en Ctte., p.461). Por ello es vital alimentar y mantener el negocio de la confrontación y las dos Venezuela: la revolucionaria y la ‘contra’.

Una manera de ocultar que la mayoría de la población no suscribe al oficialismo venecubano ni al moribundo esquema puntofijista que se apega a la política del engaño electoral dispuesto por los Castro y el heredero, para tratar de mantener una vigencia que ya no es posible.

Todas las elecciones programadas desde el 15Ag.-04 responden al mismo esquema: Venecuba-Smarmatic-CNE. Una estrategia, en términos de guerra para crear un frente que haga del voto-fraude-violencia la instancia donde se decide el futuro de esta parte de la ‘revolución’.

No será con ‘triunfos 1%’ como el del 02D-07, cuando faltaba por escrutar 1.8 de 9 millones votos, como se va a superar la crisis de este ex-país. Entonces el régimen perdió sin ser derrotado y el CNE ganó condición de ‘transparente’. Por ello Sancho, esta guerra electoral de los oficialismos de hoy y ayer asegura ‘por ahora’ la revolución venecubana.

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