Muchos
piensan aún que las altas casas de estudio tienen como una
especie de hálito que las salva de muchas de las
situaciones que padecemos hoy en este ex-país. Se cree que
son suma de saber, creación, perspectivas y porvenir y que
están al margen del despedazamiento de esta Venezuela de
la provisionalidad cada día más comprometida con el pasado
y el atraso.
Por mucho tiempo se mantuvo incólume este proceder. Pero
en el presente estamos desgraciadamente en plan de
ex-universidad. Y a ella se llega, anda y piensa de la
misma manera, a pie, como solía señalar el Maestro Juan
David García Bacca.
El año pasado y a propósito de lo que se calificó como la
brutal propuesta de reforma constitucional, la institución
mantuvo la condición de postración a que arribó hace un
buen tiempo. Sin embargo, no faltó quien hablase de un
sorprendente movimiento estudiantil que adquirió el rango
de “generación del año 07”. Pero al momento de este
discurso parece que se olvida que se trata de alumnos de
una universidad a la que todos contribuimos a arrebatarle
su casa de estudios.
Y a lo largo del lapso que se inicia el 28 de Mayo con el
cierre de RCTV, en el cual se hizo potente el grito de la
indignación y la protesta, se puso de manifiesto algo que
nadie comenta: la UCV no fue el epicentro de grandes
marchas, luchas, combates contra el avance del
autoritarismo gubernamental patentizado en la reforma
constitucional.
Ella apenas se convirtió en un lugar de concentración de
gente que venía de afuera para luego salir en
manifestaciones que se juntan al histórico grito de
‘Pueblo y estudiantes, unidos y adelante!’ En la UCV sólo
se forman ‘coaliciones electorales’. La participación de a
pie fue de decisión y orientación individual como
corresponde a una institución en plena quiebra.
Hoy, cuando la institución se apresta a realizar sus macro
elecciones de la década vuelve a estar claro que no hay un
movimiento estudiantil, profesoral, de empleados u obreros
dispuesto a luchar por devolverle la universidad a la
universidad. Por ello, todos vemos transcurrir los días y
sus actos como simples observadores. Somos pura suma de
circunstancias. Acumulación de intereses secundarios y
hasta mezquinos que forman parte de nuestras ganas de
acomodarnos.
Hacer política aquí y ahora equivale a lo mismo de ayer:
negociar el reparto del botín universitario, salvo que hoy
son más evidentes, tal vez por groseros, los
pactos-acuerdos que incluyen las posiciones de las
autoridades hechas poderes para controlar presupuesto,
ingresos propios y ‘extras’, fundaciones, Zona Rental,
servicios. Todo un mundo que junta la universidad sin
universidad al capital con capital. Por todo esto no
tendría porque extrañar la existencia de candidaturas
aupadas por entidades financieras.
Y en medio de la ‘ética del reparto’ vemos una campaña
electoral en la cual se presentan las mismas fórmulas del
pasado con su mismo mensaje: contribuir como el que más
para seguir despojando a la universidad de lo poco que le
queda de centro superior de enseñanza. La decisión en este
sentido es muy firme. Y aunque en direcciones
aparentemente opuestas coinciden con los propósitos
oficialistas: marchar a paso de destructores.
A nosotros como Cátedra ‘Pío Tamayo’ y Centro de Estudios
de Historia Actual de esta institución por más de 25 años
nos ha correspondido la tarea de impulsar el debate en un
medio en el cual está clausurada la discusión, la
confrontación de ideas. Y a propósito de la actual campaña
rectoral montamos un primer foro. Preguntamos sobre la
vigencia del discurso de la transformación universitaria.
Respondieron los candidatos Cecilia García Arocha, Eleazar
Narváez y Jorge Pabón.
Al final del evento señalamos la distancia que se sentía
entre candidatos a autoridades, en busca de más autoridad
y la comunidad siempre dispuesta, por carecer de
pertenencia, a actuar o ponerse al servicio de los nuevos
dueños.
Cuando convocamos al II Foro Rectoral, ya aprobado por las
tres fórmulas la noche del 14-04-08, ratifican su
asistencia Narváez y Pabón. La profesora García en nombre
de su equipo se excusa por aquello de ‘agenda full’. Lo
hace por medio de un correo electrónico que trae
sobrepuesto otro correo dirigido a su equipo y a quien se
señala como su jefe de campaña. Es una consulta previa a
su respuesta. Ella fija su posición para que su equipo
opine.
Dice la candidata a rectora: “Creo que desde ya debemos
mandarlos al carajo y decirles que estamos full con la
agenda. Que convoquen a quien quieran. Espero
instruccioners. Ceci”
Lo primero que hizo nuestra Cátedra, el 20-04, fue
preguntar a los destinatarios si estaban de acuerdo con
ese proceder. Y ellos guardaron silencio y dejaron que la
candidata respondiera, lo que hizo el 21-04, en un correo
que califica de “personal solo para Usted”, en el cual
señala, en medio de lo que llama “sorpresa insólita”, que
jamás escribió esas palabras y que todo se debe a una
“campaña malintencionada” y a ...“actuaciones que solo
pretenden ensuciar nuestro nombre”.
Los profesores Bianco, Méndez y Belmonte a las 8:31 del
23/04/08, nos expresan que respaldan ‘invariablemente’ a
la candidata y agregan que ...“Junto a Cecilia, hemos
querido averiguar lo más exhaustivamente posible, como y/o
por donde se logra cristalizar este tipo de actos
delictivos (delincuencia electrónica), que en todo caso
forma parte de la ‘guerra sucia’ a que hemos sido
sometidos”...
Esta explicación deja de lado lo esencial: el texto
atribuido a la “guerra sucia” salió del correo de la
profesora García Arocha y, su contenido se corresponde con
la negativa a participar en el II Foro Rectoral. Pero si
se trataba de un ‘delito electrónico’ ¿por qué no se sacó
a relucir ese argumento desde un primer momento?
En nada nos extrañaría, en consecuencia, que se nos sume a
los promotores de la vieja y gastada “guerra sucia”. No le
tememos a eso ni a la posibilidad de que se mantenga o
acreciente la lucha contra una Cátedra que sólo se precia
de ser un espacio para el debate crítico y creador. Pero
un debate comprometido con la Universidad que tendrá que
ser y no con la ex-universidad que anda y piensa con los
pies.
abm333@gmail.com