"Las
oposiciones y los medios" lo plantean como un
hecho sin precedentes. El Ministro del Petróleo conmina a los
gerentes a ser fieles-serviles a la ‘revolución’, es decir, al
‘jefe máximo. Pero se olvida que el GP es el verdadero autor de
un permanente discurso que apunta hacia lo
excluyente-totalitario. Quienes estaban al frente de la
industria en el 2002 hicieron todo lo que necesitaba el ‘jefe
único’ para ponerle la mano a la institución. Él despide con su
pito y poder autoritario a los gerentes en horas previas al
11A-02. Luego se ve obligado a reengancharlos.
Pero el fracaso del
paro petrolero que se inicia el 02/12 lo pone definitivamente al
frente de la corporación. Por ello en su mensaje ante la AN en
2004 reconoció que él montó una provocación con el cambio de la
directiva y que encontró en la institución la reacción que
esperaba para lograr los objetivos previstos. Desde entonces
“PDVSA es de todos los venezolanos”.
Sin embargo, hoy
para tener la condición de venezolano auténtico se requiere ser
compatriota, revolucionario, y adorador del ‘jefe único’ y padre
de la revolución bolivariana-socialista del siglo 21. Esto
significa que quienes no profesen este credo tendrán que irse a
Miami. Porque al igual que en Cuba, para vivir aquí hay que
aceptar que la ‘revolución’ lo es todo y que el líder es lo más
grande de la historia. A esto alude concretamente la Venezuela
Roja Rojita.
En Puerto La
Cruz el "jefe único" señaló que lo de Ramírez es
una frase para la historia: “PDVSA es roja, rojita de arriba a
abajo”. Y de inmediato lo felicitó por su mensaje: ‘vaya y
repítalo todos los días 100 veces más’. Y pontificó sobre los
méritos del genial ministro y su formación política,
ideológico-doctrinaria que lo convierte en un militante fiel a
la revolución, es decir, al ‘jefe exclusivo’.
Y no sólo es PDVSA:
“Los militares están en esta revolución, y se los he dicho; el
que no esté, mejor que se vaya de aquí.”…(EN, 04/11/06, p.A/4) Y
horas después el GP señala en Coro que “PDVSA es roja rojita. La
Fuerza Armada es roja rojita y cada día lo será más. La UNEFA es
roja, bien rojita. Y Venezuela es roja rojita”. (EN, 06/11/06,
A/2).
Es la nueva
caracterización de este ex-país. Todas las instituciones son
rojas, rojitas. Todos los poderes son rojos y están en manos del
presidente. El desafío no podía ser mayor: ningún poder está
fuera del control de la ‘revolución’, es decir, del GP. ¿Y cómo
puede perder el mando-poder quien tiene el control total de
todos los poderes?
De allí que sea
necesario estar alerta porque “los conspiradores andan tratando
de buscar un golpe de Estado, una guarimba, cantar fraude y
hacer un escándalo de cualquier cosa” para tratar de desconocer
su triunfo (EN,04/11/06, A/4). Y en Puerto La Cruz lo ratifica:
la oposición desesperada tiene un plan ‘B’ para desconocer su
triunfo el 03D. Y frente a esta amenaza anuncia un plan ‘Ch’
para defender la revolución. Porque él es la revolución. Y este
contexto es el que toma para advertir que la Fuerza Armada es
cada vez más roja rojita, bolivariana y revolucionaria. (EN,
05/11/06, A/4).
La FA, según este
discurso, no es un simple apoyo a la ‘revolución’. Forma parte
de este régimen militarista que ha hecho de la tarifa un arma de
las más efectivas, y por consiguiente del proyecto rojo rojito y
de la estructura de la burocracia-corrupción, como lo han
demostrado grandes escándalos.
Y es a este
bloqueo rojo, del cual forman parte también
muchas otras estructuras-fuerzas: cuerpos de seguridad del
Estado, reservistas, misiones, círculos, brigadas, frentes,
comités, guardias, consejos, componentes extranjeros, a quien se
dispone enfrentar las oposiciones. Y lo hace obviando el reclamo
de condiciones electorales, porque tiene la convicción de que
triunfará por encima de toda maquinaria de fraude-trampa y que
además, cobrará.
En este
anunció-amenaza se basa el oficialismo para acusar a “los
unitarios” de estar preparando un plan golpista para desconocer
los resultados electorales que favorecerían al GP. Las
oposiciones gritarán fraude y en forma irresponsable se
llamará a la calle a una gente que no tiene ningún tipo de
preparación. Y de inmediato actuarán los órganos de seguridad
del Estado para garantizar el orden público. La represión
legalizada. Es el escenario trágico de que hemos hablado. Las
fuerzas masacradoras en acción.
De nuevo se
ha creado la ilusión de que voto-fraude y
disposición para cobrar darán como resultado que el poder, con
toda su capacidad de violencia, proceda a resignarse y
declararse vencido. Esto, en principio, no tiene ningún asidero.
Es una acción que, en todo caso, habría que leer como
concertada con las fuerzas gubernamentales, a quien favorecen
desde todo punto de vista.
¿Es así como se
pretende enfrentar a este régimen totalmente rojo y dispuesto a
impulsar una historia manchada con ‘la sangre que sea necesaria’
para vencer las guardias blancas de la “opresión imperialista”?
¿Qué explicaciones se le dará al colectivo a partir del 04D-06?
¿Hasta cuándo juego, manipulación e irresponsabilidad
“opositora” al servicio del ‘proyecto-proceso?