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¡Es momento de
hablar!
Pablo Ulises García
Pérez
Todo condicionamiento, por
principio, es reversible en el tiempo y lo es, por
una razón lógica, quien establece las normas para
beneficio propio, sustentado en una circunstancia,
simplemente busca ganar tiempo en su propósito;
pero, lamentablemente, termina enredado en su
propia trampa.
La historia nos señala que la
capacidad pensante siempre supera las trabas y
eso, precisamente, es todo condicionamiento. Un
esquema, mediante el cual se pretende, no educar y
respetar; simplemente penalizar un comportamiento
social. Esta dinámica, frecuentemente aplicada
políticamente en comunidades donde existe
predominio; mas no equilibrio y que persigue
simplemente imponer patrones “legales” para
silenciar cualquier posición que pudiese ser
adversa y “justificar” la aplicación del
reglamento.
No en vano, hemos visto como
potencias mundiales se han desboronado. Sin ir muy
lejos, aquí mismo en nuestro país los generales
Gómez y Pérez Jiménez son dignos representantes de
penalizadores del comportamiento social, quienes a
pesar de haber sido representación ejecutiva de
nuestro país, esa misma sociedad les ha calificado
como dictadores. Todos controlaron y crearon sus
imperios y a todos, la capacidad pensante del
entonces logró derrotarlos.
Llegar al silencio,
como propósito es costoso, para quienes pretenden
imponerlo y para quienes no comparten esa
práctica. La diferencia radica en que quienes
pretenden silenciar, para lograrlo añaden un
elemento represivo que casi siempre se les escapa
de las manos, generando un efecto multiplicador
que los conlleva inexorablemente hacia la
complicidad al tener que, por compromiso,
justificar la acción de los “héroes”; mientras que
quienes no comparten la práctica, mientras logran
organizarse, ponen las víctimas, llevando la peor
parte. No siempre el muerto es el delincuente y
esto lo percibimos tanto los que integramos las
sociedades comunes, como los que tienen la
respuesta en sus órdenes y acciones. Por eso,
siguen vivos Alberto Carnevalli, Fabricio Ojeda,
Lovera, Jorge Rodríguez, Alirio Ugarte Pelayo.
Igualmente, las víctimas del 11 de Abril, las de
la Plaza Altamira, Danilo Anderson y, por ahora,
las más recientes en los sucesos ocurridos hace
pocos días en la ciudad de Caracas. Acaso, ¿tuvo
algo que ver el hampa común en esas muertes? Las
consecuencias el proceso degenerativo del
condicionamiento.
En la práctica, así como los
propósitos políticos tienden a lograrse en el
tiempo. Igualmente, pueden agotarse rápidamente en
la práctica, viéndose obligados a recurrir a lo
que en su oportunidad adversó. O ¿Es que acaso, no
somos consecuencia del agotamiento de un sistema?
Al menos eso nos lo creímos. A pesar del 27 de
Noviembre y del 4 de Febrero. ¿Quiénes gobiernan
actualmente al país? El silencio, también es
producto de la profundización propuesta. Muchos se
dicen abiertamente: Si ocurrió en Cuba, ahí se
agotó un sistema y se impuso “libremente” una
revolución que ha permanecido durante casi
cincuenta años. ¿Por qué no en otro país? La idea
lógicamente es tentadora en consecuencia, puede
ser el propósito hacerlo libre y pacíficamente.
Méritos sobran, de hecho, las propuestas para
extender períodos gubernamentales y la nominación
al premio Nóbel de la Paz están en boca de
propulsores de la libertad, verdaderos hijos de la
Patria Madre que los parió.
En cualquier
sociedad libre, por principio, quien nada teme, no
condiciona. Opta por aplicar y respetar las leyes,
según la Constitución. Sólo en sociedades
cerradas, la voluntad personal, está centrada en
la justicia de la unilateralidad, al servicio del
sector dominante, configurada por elementos del
sector dominante y bajo la óptica dominante.
¿Profundización Democrática?...-
Los valores
morales en la escuela
Miriam
Mendoza
Los valores morales son
aquellos valores que perfeccionan al hombre en lo
más internamente de su ser, haciéndolo más humano,
con mayor calidad como persona.
Los valores
morales surgen primordialmente en el individuo por
el influjo y en el seno de la familia, y son
valores como el respeto, la tolerancia, la
honestidad, la lealtad, el trabajo, la
responsabilidad, etc.
Para que se dé esta
transmisión de valores es de vital importancia la
calidad de las relaciones con las personas
significativas en su vida, sus padres, hermanos,
parientes, amigos y maestros. Es además
indispensable el modelo y el ejemplo que estas
personas significativas muestren al niño, para que
se dé una coherencia entre lo que se dice y lo que
hace. Adicionalmente, es de suma importancia la
comunicación de la familia. Cuando el niño ha
alcanzado la edad escolar, se hará partícipe de
esta comunicación abierta, en la toma de
decisiones y en aportaciones sobre asuntos
familiares.
Posteriormente, estos valores
morales adquiridos en el seno de la familia
ayudarán a insertarlos eficaz y fecundamente en la
vida social. De este modo, la familia contribuye a
formar personas valiosas para el bien de la
sociedad.
Sin embargo, en la actualidad se hace
necesario reconocer que el comportamiento de la
sociedad indica que se están dejando de asumir los
valores morales, y en cambio se están inyectando
otros que podemos llamar antivalores, lo cual mina
o denigra las relaciones humanas. Las causas
pueden ser diversas, pero la más significativa y
de mayor peso es un grupo familiar disfuncional,
con conflictos familiares y padres irresponsables
en la crianza de sus hijos. Hoy en día, el grupo
familiar se ve caracterizado por la común figura
de la madre-padre, como único sostén del hogar y,
por lo general, ésta debe salir a trabajar,
dejando el cuidado de la casa de los niños
mayores, y en caso de que éstos sean muy pequeños,
distribuyéndoles entre familiares, vecinos y
guarderías. Otros casos menos dramáticos, nos
muestran a los dos, padre y madre, en la necesidad
de salir a trabajar en multiplicidad de horarios y
lugares, con los consabidos inconvenientes: niños
y jóvenes sin ayuda ni controles paternos,
desasistidos o con poca atención, cuando no nula
en el desarrollo de tareas escolares o en la
formación de hábitos de estudio; poco o ningún
aprovechamiento del tiempo libre, sin contar con
otra serie de problemas sociales de mayores
dimensiones, a los que se expone el niño y el
joven, porque sus padres no disponen de tiempo
para atenderlos. Ante lo planteado, la
consideración y atención oportuna que se le brinde
a la familia hoy, dependerán muchas de las
situaciones que socialmente afectan al país,
porque la familia es la base de la
sociedad.
Ante esta situación, la educación
debe tomar sentido y determinar clara y
definitivamente su dirección hacia los fines que
persigue el medio social sobre la cual se
desarrolla. La educación se concibe como un motor
de desarrollo social y económico; por lo tanto,
debe ser capaz de transformar y desarrollar la
sociedad y no sólo mantenerla. Y para ello, es
necesario la integración y participación de la
familia en el proceso educativo. Es fundamental
que la familia participe más activamente en el
proceso educativo de sus hijos y de las
actividades que organice la escuela y, por
consiguiente, la escuela será así, un recurso para
el rescate y desarrollo de la familia. Por esto es
necesario que desde la escuela se desarrollen
programas educativos dirigidos a todos los niveles
del sistema y a los diferentes sectores de la
sociedad.-
El ropaje
jurídico de la dictadura
chavista
Luis De
Lion
Acatada la orden que desde
Miraflores recibiera la mayoría oficialista de la
Asamblea Nacional y consumada ésta a través de la
juramentación de los 49 nuevos magistrados del
TSJ, Venezuela entró de lleno en la era de la
justicia supremamente bolivariana. Digo esto, por
cuanto quedó claro y como tal debe ser asumido,
que el punto de partida para todo aquél que vaya a
administrar justicia en Venezuela de ahora en
adelante, es que lo hará a partir de su militancia
política. Atrás quedaron las concepciones de
derecho, las interpretaciones jurídicas y lo más
peligroso, desaparecen los derechos
constitucionales.
La primera víctima es la
llamada igualdad, ante la poderosa justicia
bolivariana no todos somos iguales. Desde ayer
quedó institucionalizada la división de la
ciudadanía venezolana entre aquellos que
simpatizan con el régimen y aquellos que se
oponen.
El derecho constitucional venezolano,
ha sufrido un duro revés.
“Compartimos la
preocupación que ha expresado Human Rights Watch y
la oposición de Venezuela. Creemos que la
separación de poderes es una parte intrínseca de
la democracia que es respetada en toda América
Latina y por la comunidad internacional”, comentó
el portavoz del Departamento de Estado, Richard
Boucher.
¿Qué esperanza nos queda a los
millones de venezolanos que nos oponemos, a la
sutil pero creciente dictadura de Hugo Chávez?
El abogado y filósofo norteamericano, Ronald
Dworkin, autor entre otros libros de: “Virtud
soberana. La teoría y la práctica de la igualdad”
consideran que la desobediencia civil es una
teoría jurídica basada en el derecho que tenemos
todos a la igualdad. Así mismo, Dworkin defiende
con vehemencia las ideas de dignidad humana y de
igualdad política, las cuales suponen que los
miembros más débiles de una comunidad política
tienen derecho, por parte del Gobierno, a la misma
consideración y al mismo respeto que se han ganado
para sí los miembros más poderosos.
Dicho esto,
me interrogo en cuanto a si no habrá llegado el
momento, para que los líderes políticos
venezolanos que militan en las filas de la
oposición, comiencen a mentalizarse que se ha
perdido una de las virtudes indispensables de la
soberanía democrática y en consecuencia, a partir
del momento en que no todos somos tratados de la
misma manera; y habiendo perdiendo todo respeto y
consideración por sus oponentes, el gobierno de
Hugo Chávez dilapidó así toda su
legitimidad.
No me queda otra que terminar con
la idea esperanzadora que de la necesaria
reflexión de los líderes de oposición, se pase en
la práctica a una corajuda y frontal estrategia de
oposición política, visionaria, con verdadera
pericia política y sin agendas personales.
Convencido que nunca es demasiado tarde, si lo que
se pretende es deshacerse de una dictadura, para
restablecer así los derechos constitucionales.
http://www.webarticulista.net/-
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